Ayer tuve una conversación muy amena con un buen amigo, que se dedica a la venta de un artículo muy concreto, expondré esta conversación al final pero me dio la idea para escribir este post, una idea que ya me rondaba hace tiempo, pero que los lamentos de mi amigo me impulsaron a escribir.
Pero empecemos por el principio. Amazon fue fundada en 1994, por Jef Bezos, el origen del nombre es el río Amazonas. En principio iba a vender libros por internet, y la cosa empezó a irle pero que muy bien, y bueno, en unos años ha pasado a ser una de las compañías con mayor capitalización bursátil.
Hasta ahí bien, que más da, otra historia de éxito de esa América hecha a sí misma. Pero el problema es que este hombre, el tal Bezos, se ha convertido en uno de los hombres más ricos del mundo, y parece haber calcado su historia a la de otro gran rico, Rockefeller.
¿Se acuerdan de Rockefller? No, no me refiero al monigote de José Luis Moreno, me refiero al de la Standard Oil. Si recuerden la historia, la Standard Oil, surgida de la nada se convirtió en una compañía con una posición de dominio tal en el mercado del petroleo que tuvo que ser dividida en 34 empresas independientes.
El amigo Rockefeller, llegó a acuerdos con empresas ferroviarias y abarató las tarifas de transporte, a cambio de la reducción de costes las empresas ferroviarias recibían carga constante y uniforme, lo cual es lo ideal para cubrir los costes fijos y poder ganar dinero con los otros clientes.
Gracias a eso los consumidores obtuvieron precios estupendos para los derivados del petróleo, o sea, todo precioso, Standard Oil ganaba dinero, las ferroviarias cubrían sus costes fijos y podían ganar dinero y los consumidores obtenían precios bajos… ¿Dónde esta el problema?, pues en el abuso de tratos preferenciales que llevaba a la quiebra a pequeñas y medianas empresas del sector.
Bien pues ahora vayamos con Amazon:
Amazon tambien es una empresa descomunal, con diversas actividades, la facturación de Amazon, viene a ser el PIB de Nueva Zelanda, a pesar de ser el monstruo del comercio electrónico, el dinero lo gana en Amazon Web Services, un servicio de alquiler de servidores, en 2017 facturó 17.400 millones de dolares en esta filial y ganó 4.300 millones de beneficio.
Sin embargo en 2017 la división retail arrojó un resultado negativo de 3.000 millones de dolares, amigos… son los costes de envío los que les generan ese descomunal agujero, o se creen ustedes que todos esos paquetitos que los couriers les llevan a casa son gratis.
Todos estos privilegiados del servicio “Prime” que no pagan los costes de envío, esos consumidores fieles y felices están sin saberlo financiando el hundimiento y quiebra de los competidores para que al final se encuentren con un monopolio, que entonces si les cobrará lo que toca…. O mucho más.
Se trata de hacerse con una cuota de mercado del comercio electrónico que sea un monopolio de facto, por eso pierden dinero en el retail que es compensado por la otra filial, cuando eso se consiga, podrá aplicar los precios que le de la gana, y recuperar todo lo que se perdió por el camino.
Y se arrodillarán ante Bezos todos, los proveedores de su servicio de market place, los operadores logísticos y por supuesto todos esos “primes” que se creen que el todo gratis existe y está fabricado por un buen hombre que quiere que sean felices.
Cuando califico a Jeff Bezos de ser el Anticristo de la libertad de competencia, de ser el nuevo futuro monopolista, no me estoy refiriendo a nada bíblico, en realidad es una metáfora. Es bien cierto que es un enemigo de la libre competencia y que tiende a crear un monopolio para despues pasarnos factura, lo de Anticristo es metafórico a pesar de:
Como pueden ver esto no es más que una coincidencia, el hecho de que en alguna Catedral de Italia representen al Anticristo como un Jeff Bezos con cuernos y rabo, es casual, además lo del rabo y los cuernos no va con Bezzos, bueno… no iba porque con lo del divorcio quizá el fresco de esa Catedral es profético.
Esto ya saben, tan solo es una coincidencia, pero bueno nunca está de más dejarlo escrito por si acaso.
Vayamos a un ejemplo práctico de estas prácticas, de hecho en el origen de todo esto hemos dicho que estaba la conversación con un amigo. Bien este amigo es un productor de un artículo, vamos a suponer que son Acuarios, este amigo fabrica acuarios, y lo habitual era que los vendiera a un mayorista (M), en realidad a muchos, y estos se lo venden a un minorista (m) en realidad a muchos.
El negocio funcionaba de un modo razonable, el mayorista compraba con un descuento, y revendía al minorista que vendía a su vez al cliente final. Pero la aparición de Amazon lo ha cambiado todo. Resulta que el minorista (m) se pone a vender en el market place de Amazon y por cosas del destino, consigue que su producto se venda, y pasa de vender 10 acuarios al mes a vender más de 1000.
Con el tiempo, el mayorista tiene que cerrar, porque el minorista se puso de acuerdo con el fabricante (mi amigo), y se saltaron la habitual cadena de distribución, y todo gracias a la plataforma Amazon. Amazon le obliga a pagar al minorista un 18% de su venta en concepto de comisión por usar su canal. Y aquí entra en juego el Anticristo, resulta que Amazon, que lo tiene todo, precios de venta, cantidades, clientes, precios de compra… todo, se pone en contacto con el fabricante (mi amigo) y le dice que deje de venderle al minorista y que les venda a ellos que venderán su producto en el canal Amazon.
Claro como saben que se vende, quieren pastel, y le ofrecen al fabricante una comisión menor, en vez del 18%, del 7%. Lo curioso del asunto es que mi amigo, también tiene su propia página web para vender al cliente final, y el descuento ahí es del 40%, muy por encima del que da el minorista o Amazon por sí misma. Pero los consumidores, o sea ustedes, amables lectores no compran en esa web, porque no es la de Amazon, y no se fían, no sea que si es tan barato les estafen, o quizá porque no les inspira la confianza que inspira el monstruo de siete cabezas, Amazon.
Al final va a ocurrir lo siguiente, los mayoristas están desapareciendo, de hecho mi amigo me dice que sus clientes de siempre están cerrando, los minoristas que venden en Amazon si venden poco no importan, pero si venden mucho son sustituidos por el propio Amazon. O sea que al final, destruyen a mayoristas, minoristas y…, al fabricante, pues le impondrán las condiciones que quieran, que ahora son del 7%, pero que al final serán de mucho más. Y tambien al operador logístico, que tendrá que tragar en los precios, y al final a ustedes los clientes finales, porque cuando solo Amazon les venda los acuarios, les pondrá un precio mucho más caro del que pagan ahora con toda la cadena de distribución.
En este blog, hemos hablado de las bondades de estas plataformas en el control de la inflación, hemos dicho como hacen caer los margenes de los productores, de forma que en teoría benefician a la sociedad, pero cuando sean un monopolio completo, entonces ya no serán un dique contra la inflación, serán lo contrario.
Por todo esto, en mi opinión más tarde o más temprano, Amazon se convertirá en la nueva Standard Oil, de hecho creo que es razonable y necesario que así sea. Además Bezos se ha ganado muchos enemigos, aparte de su exmujer, para empezar uno de sus enemigos es Donald Trump. El pobre Donald ha fracasado en el tema del bloqueo de la Administración y ahora necesita ganar popularidad, y que mejor que una guerrita externa cuando tienes un problema interno, por eso no descarten una intervención militar en Venezuela (puede que además sea hasta necesaria), y porque no buscar un enemigo interno.
Y si Amazon y Bezos son un buen enemigo interno, sería muy popular dividir Amazon, pues otras empresas como Wal Mart se beneficiarían de esto, esa y todos los centros comerciales que languidecen allí y que representan muchos puestos de trabajo, sería muy vendible como una medida antimonopolio que beneficiaría a la sociedad.
Además como toda acción genera una reacción, los candidatos del partido demócrata que se enfrentarán a Trump en 2020, mejor candidatas como Elizabeth Warren, Kamala Harris, Kirsten Gilibrand o Tulsi Gabbard, son todas partidarias de recortar el poder de empresas como Amazon y de devolver el poder al consumidor.
O sea que gane quien gane, tiene todas las papeletas para ser partidario de dividir Amazon, al estilo Standard Oil.
Y en teoría aquí es donde les dejaría con el video que viene que ni pintado aquí, pero hete aquí que le di el texto a mi mujer y se produce este dialogo:
-mira, leete el post si quieres
-¿pero tú no eras liberal, estás pidiendo la intervención y troceo de Amazon?
-yo estoy a favor del capitalismo, no de los capitalistas.
De eso se trata amigos, de que el capitalismo ha demostrado su eficiencia para darle a la sociedad, bienes y servicios a un coste razonable, pero si y solo si opera en regimen de libre competencia, de no ser así, si se convierte en un regimen monopolistico, eso ya no es capitalismo, por eso, estoy a favor del capitalismo y no de los capitalistas, sobre todo cuando son capitalistas monopolistas.
Sin más dilación les dejo con el video, que será “Sympathy for the devil” de los Rollings Stones, viene que ni pintado, recuerden, “soy un hombre de riquezas y buen gusto”, “mucho gusto de conocerte, espero, y tu conoces muy bien mi nombre, pero lo que te desconcierta de mi, es la naturaleza de mi juego”, en efecto es exactamente eso, nos desconcierta su juego, pues en teoría, nos favorece, pero sin embargo a medio plazo nos condena.
P.D. Al final, todo esto tiene como objetivo avisar a nuestros amables lectores, a esos inversores que buscan rendimientos, que quizá deben alejarse de Amazon, no ya tanto como un corto, más bien estar lejos de esa acción, pues un día pueden despertarse con un premarket de un -40%, porque se hayan iniciado procedimientos antitrust contra la nueva Standard Oil.
Disclaimer
El forero theveritas, no está autorizado legalmente para recomendar inversiones, no está en su ánimo atemorizar a los inversores, ni disfruta azuzando el miedo, pero si esto pasa, y tenemos precedentes, lo mejor es no sufrirlo.