La ausencia de valores morales en las empresas atenta contra los inversionistas. Hoy analizaré el caso de Enron y cómo las condiciones que dieron origen a este fraude siguen en pie, para horror de los inversionistas. Los valores morales son vistos por algunos como maniqueísmo de gente con mentalidad cuadrada, cuando en realidad son la primera y la última línea de defensa que los inversionistas tenían dentro de las empresas para protegerse contra el fraude contable y financiero.
Tomando como excusa el tema del sexo para empezar a abolir los valores morales a los que se califica como "obsoletos", lo que han hecho ha sido abolir los límites entre el bien y el mal, y eso conduce a un relativismo absoluto donde las palabras pueden justificar lo injustificable. Un caso espantoso donde se justifica lo injustificable es el indulto de un pedersatra europeo que causa protestas en Marruecos, donde se protege a alguien por ser europeo, en lugar de hacerle responder por sus actos. Ese relativismo moral absoluto que tenemos en el mundo actual hace que violar o robar ya no pertenezca al reino de lo inmoral, sino que a base de eufemismos, donde la mentira se llama ahora "problema de consistencia semántica", y el robo y lavado de dinero que aprovecha brechas legales se llama "actos dentro de la ley", gradualmente corroe a la sociedad, pues se ocupa el mismo relativismo moral para robar dinero a los contribuyentes mediante un rescate a los bancos y culpar a los contribuyentes para robarles su estado de bienestar (se culpa a las víctimas), o para robarle a los inversionistas de una empresa.
En la tierra de los ladrones, la víctima es el idiota. Y los idiotas ya empezaron a ser los inversionistas. Si recordamos los famosos CDO sintéticos de Goldman Sachs, destinados a inversionistas sofisticados, podemos ver que con la crisis perdieron mucho dinero. Los CDO sintéticos eran como un fondo de inversión, pero en lugar de tener bienes físicos como respaldo, eran respaldados por bonos, que a la vez eran respaldados por los créditos subprime a los que las calificadoras le dieron calificación AAA, es decir, el respaldo era puro vapor. El contrato de los CDO sintéticos además tenía cláusulas en las cuales en caso de morosidad de los créditos, el banco sacaría primero su dinero y su ganancia, y el resto (la pérdida) se repartiría entre los inversionistas. Goldman Sachs se libró de cargos criminales al decir que los inversionistas conocían los riesgos. Es decir los idiotas son los inversionistas, los estafaron y para agregar insulto a la herida, les vieron la cara de tontos. ¿Y qué dijeron las agencias calificadoras de crédito? Dijeron que ellos sólo emiten opiniones, sólo opiniones. Y claro, son opiniones contratadas por el que es evaluado. ¿Quién es el idiota? El inversionista, por supuesto.
Los abolicionistas tendrían que estar muy contentos, porque la "mentalidad cuadrada" de los valores morales y el "tonto honesto" ya no serán un obstáculo para los planes de saquear las arcas de los inversionistas. Claro, los inversionistas querrían gerentes honestos y empleados honestos en el lugar donde vayan a invertir, pero con el abolicionismo generalizado, encontrar eso es sumamente difícil, porque los valores morales imponen límites que hacen que los números sean inferiores a los que producen los que engañan a los inversionistas.
Cuando desaparecen los valores morales, se borra la frontera entre el bien y el mal. Eso es malo para las empresas y los inversionistas.
Los fraudes corporativos
Igual que los crímenes informáticos, los fraudes financieros van en aumento, al punto de que los que cometen los fraudes ya no actúan sólos, y ya se ha visto fraudes que tienen varias decenas de personas involucradas, lo que apunta a la decadencia moral que prevalece. En otros tiempos la gente debía cometer los fraudes a escondidas, sin que la gente se diera cuenta, y eso reducía el potencial de organización de los criminales y su capacidad de obtener aliados dentro de las empresas. No es de extrañarse que muchos inversionistas ya no crean en los balances contables.
Si el margen de utilidad de una empresa es de 10%, eso significa que se ocupa recibir 10 veces más dinero del que obtiene como utilidades. De este modo, si en un fraude se roban una cantidad, eso significa que se ocupa 10 veces el monto robado simplemente para restaurar todo a su estado normal. Además los fraudes causan un daño en el valor de mercado de una empresa que oscila entre 500 y mil veces el valor de lo robado.
Entre los problemas de fraude encontramos adulteración de estados financieros, "préstamos" a ejecutivos y saqueos, insider trading, favoritismo hacia los IPO, beneficios jugosos a directivos que se retiran. ¿De dónde sale todo esto? El estado de la economía enmascara los problemas y les resta visibilidad ante la sociedad. La falta de valores morales evita una conducta recta. Los incentivos a ejecutivos fomentan conductas indeseables, porque para cumplir las expectativas de Wall Street y el precio de las acciones están ligados a pronósticos, con un enfoque de corto plazo, y los ejecutivos suelen tener muchos stock options que exceden su salario, de modo que la labor de los ejecutivos se centra en maquillar y cocinar números y no en modificar la realidad y capitanear el barco. La avaricia, el poder concentrado y la impunidad fomenta el camino rápido del fraude. La bonanza de las empresas, el auge aparente, suele disfrazar los fraudes. La adversidad económica en la empresa, también.
Los inversionistas buscan empresas con buenas ganancias y bajo riesgo. El riesgo a menudo es medido por la volatilidad del precio. Y se premia al directivo cuando mejoran las ganancias. Al final lo que se quiere no es una gráfica con forma de cordillera montañosa en ascenso, sino una línea recta ascendente, simples números, no realidades.
En los EUA hay una severa crisis educativa, donde se enseña a la gente a copiar, memorizar y no a pensar. En España se empuja los recortes en educación. Y al hacer outsourcing en países pobres, realmente no hay nadie analizando lo que pasa y pensando en mantener las cosas dentro de los límites de la rectitud.
Las reglas de contabilidad y la manera en que se entiende la bonanza de una empresa, empujan prácticas contables indeseables, porque se basa en reglas que permiten la "creatividad" y no en principios ni valores morales. Esa "creatividad" viene del hecho de que se permite todo lo que está prohibido y no hay reglas para prevenir todas las situaciones, lo cual evita que los auditores prohiban cosas que no debieran ser. La contabilidad es la olla donde se cocinan los números, y es donde es más fácil adulterar la percepción. Y a ello se suma que hay auditores y reguladores que evitan su responsabilidad, hay auditores avaros, algunos auditores se acercan demasiado a sus clientes, y se mira la auditoría y los valores morales como una limitación para obtener ganancias y como una fuente de pérdidas.
Sacar cosas de los balances contables, el reconocimiento de ingresos, las reservas para fusiones, la sobreestimación de pensiones, capitalización de activos consumibles, la omisión de amortizaciones y depreciaciones, los fraudes con sobreestimación de cuentas por cobrar, subestimación del costo de mercadería vendida para sobreestimar los inventarios, subestimaciones de pasivos al no reconocer o registrar pasivos, sobreestimación de activos por medio de fusiones y adquisiciones, son algunos de los medios que se usan para fraudes contables. Y ni hablar de la desinformación por medio de medios de comunicación, en las discusiones gerenciales y reportes gerenciales, o en los pies de página de los estados financieros.
Enseñanzas del caso Enron
El caso Enron es un caso muy notable, debido a que el fraude fue en extremo complicado y elaborado. Involucraba muchas transacciones y problemas contables, donde lo que se hizo no fue "mentir" sino simplemente oscurecer el fraude y ocultarlo a punta de complicar las cosas. Tras la desregulación de oleoductos, Enron nace de una fusión de empresas, se endeudó masivamente y ya no tenía derechos exclusivos sobre los oleoductos, y desarrollaron una "estrategia creativa". Y no resulta una sorpresa que el "estratega creativo" fuera un experto en banca y finanzas de apellido Skilling. La estrategia consistió en crear un "banco de gas" para comprar y vender gas, crear un derivado de la energía, crear una división financiera y poner al estratega a cargo. Pronto Enron tenía más contratos que los competidores y pudo dominar el mercado, predecir precios y obtener mayores ganancias.
El estratega contrató a un trader de apellido Fastow, al que puso a cargo de las finanzas y creó un sistema de evaluación de empleados basado en ingresos generados que creó gran competencia entre los empleados. Enron empezó a mejorar sus ingresos pero no sus flujos de caja. Entregaban balances contables ininteligibles a los inversionistas y todo lo que importaba era empujar el precio de las acciones hacia arriba. Hubo 20 trimestres seguidos de ganancias en ascenso.
Enron pasó de hacer dinero con activos físicos como los oleoductos, a hacer dinero con un concepto difuso de "operaciones y servicios energéticos al por mayor". Evadieron millones al fisco por medio de los stock options pues al ejecutar las opciones, la empresa deducía el dinero como gasto para reducir el pago de impuestos, pero las reglas de contabilidad les permitía omitir aquello en el reporte de ganancias. Las opciones les permitían pagar menos impuestos y reportar mayores ganancias y se veían estimulados a manipular el precio de las acciones.
La "estrategia creativa", por su misma "creatividad", tenía una ausencia total de límites. El negocio central reportaba pérdidas, pues pasó de ser una empresa que trabajaba con cosas reales a hacer trading de derivados sobre ganancias imaginarias, que resultaban de estimular a los empleados a mentir sistemáticamente respecto de sus utilidades para aparecer como menos volátiles. Los activos asociados con derivados en el 2000 crecieron más de 5 veces, y sus pasivos crecieron casi 6 veces.
La autorización de la alta gerencia a sus jefaturas era como un cheque en blanco para cocinar números a toda costa. Hubo tratos en áreas no relacionadas con su negocio, tales como derivados climáticos, servicios de agua, servicios de banda ancha y generación de energía. Todo el mundo creía que Enron estaba empujando una revolución y por eso pudieron empujar las reglas. Los empleados rivalizaban ferozmente entre ellos. Los traders de Enron competían ferozmente y de la manera más desleal. Pasó de ser la "compañía líder en energía del mundo" a ser "compañía líder del mundo" al menos en el eslógan publicitario.
En 2000 ocurren algunos hechos sospechosos.
- Agosto: La CEO de la empresa de servicios de agua deja la empresa.
- Noviembre. Joseph Sutton, vice chairman de Enron se va.
El 2001 fue el año de la verdad.
- Mayo. Jay Clifford Baxter, vice chairman de Enronse suicida. Thomas White, Jr.,se va. El chairman de Enron Accelerator se va.
- Agosto: El CEO de los servicios de banda ancha se va. El estratega Skillings partió de la empresa sin dar una razón. El precio de las acciones empezó a descender.
- Setiembre: ocurre el atentado de las torres gemelas (se dice que en el edificio número 7 que se cayó sin razón, estaban los archivos del SEC sobre el caso Enron que estaba siendo investigado). Hay quienes sospechan que hay más peces gordos de los que realmente conocemos, en estratos altos de la política, algo que a estas alturas no nos resultaría extraño. El científico Niels Harrit y otros ocho científicos encontraron rastros de toneladas de nanotermita (un explosivo de uso militar) sin detonar en los escombros de las torres gemelas que no pudo provenir de los aviones que se estrellaron (VIDEO: Entrevista a Niels Harrit).
- Octubre: Reportan una pérdida de varios cientos de millones, pero no un "equity write down" de más de mil millones, Moody's le hace una degradación.
- Diciembre: Enron se declara en bancarrota.
Puede verse más información sobre el caso Enron en los siguientes enlaces:
¿Y el riesgo de Enron? El riesgo es una percepción, y supieron manejar muy bien las percepciones y desinformar a los accionistas por mucho tiempo. ¿Se puede confiar en los números cuando hay ausencia de valores morales? ¿Acaso es tener mentalidad cuadrada y obsolescencia social el tener valores morales que impidan este tipo de cosas? Los inversionistas tendrán que decidir. Para evitar la caída del precio de las acciones, las pérdidas de valor de activos no se reconocían, se reportaba ingresos falsos. Se manipulaba los flujos de caja en especial en los cuartos trimestres. Hubo transacciones con fechas pasadas para registrar ingresos por los montos que se ocupaba para cumplir con los inversionistas.
La ausencia de valores morales les dio una licencia para engañar. Las reglas contables sin valores morales son meras reglas para jugar a los calabozos y dragones a su antojo. El "lease" sintético permitía mantener problemas fuera de la contabilidad. El EITF 84-15 permitía no hacer consolidaciones aunque fueran dueños de más del 50%. El EITF 90-15 permitía no consolidar si hubiese un 3% de capital externo, lo que permite crear ganancias imaginarias y ocultar pérdidas reales. FAS 125 y FAS 140 permitió fortalecer esta regla. Usualmente las empresas tendrían que estar consolidadas si la empresa es dueña de más del 50%.
La historia sigue, porque falta hablar de los pies de página de Enron, del "malentendido en las ganancias" de octubre 2001, Andersen, Chewco, LJM1, de los informes de Enron. Enron fue la sétima empresa más grande entre las 100 más grandes y generó gran euforia y entusiasmo entre los inversionistas. Enron pagaba jugosas tarifas y ninguna de las empresas o analistas involucrados advirtieron sobre los problemas, sino que más bien recomendaban la inversión. Las empresas legales contratadas ayudaron en lugar de evitar los problemas de desinformación de la compañía hacia terceros. Moody’s, Standard & Poor’s y Fitch/IBCA recibieron generosos pagos de Enron. Todos estaban comprados.
El reconocimiento de ingresos
¿Por qué entonces es relevante el reconocimiento de ingresos para los inversionistas? Porque los fraudes contables, que resultan de la falta de valores morales, pueden dar una idea equivocada acerca de la salud financiera de una empresa y perjudicar al inversionista, al mostrar a la empresa mejor de lo que realmente está. En el caso de Enron se reconocía el ingreso al firmar contratos, basados en la estimación del valor presente de todos los ingresos y costos futuros. La falta de valores morales hacía que eso fuera sólo un asunto de manejo de datos sin importancia y no un problema moral.
Este tema de reconocimiento de ingresos hoy es relevante para las empresas en tanto pueden estar adquiriendo paquetes y productos y servicios que deberían tener un precio justo.
En el caso de Enron, los ingresos por servicios se reconocían en el momento de la firma del contrato. ¿Acaso esto es un problema? Sí lo es, como veremos más adelante. Cada fraude contable suele hacer que el valor de mercado de las acciones baje entre 500 y mil veces el monto del fraude. Y si bien el caso Enron fue muy visible, los fraudes contables no son tan escasos como la ausencia de escándalos prensa lo hace parecer.
Registro contra lo entregado
Como sabemos, a las empresas les conviene registrar los ingresos lo antes posible y hacer los pagos lo más tarde posible. Eso hace que a nivel contable el maquillaje de los números reconozca el ingreso al suscribir el contrato, se reconocen los ingresos de todos los huevos vendidos que salen de una gallina que apenas está naciendo, lo cual naturalmente es un adefesio conceptual. La gallina en este caso es un servicio, que como sabemos, debería cobrarse contra entrega, de modo que si contratas un servicio por varios años, la empresa sólo podría reconocer los ingresos por el servicio prestado del mes, establecidos en el contrato, una vez que el mes haya concluido, y no al suscribir el contrato. También podría ser un hardware vendido, cuyo ingreso se reconoce al entregarse y no al suscribir el contrato.
Precio justo
También tiene que haber un componente de justicia en el precio, porque no es justo que se cobre igual un contrato por 2 meses que por 5 años. Se supone que a igual servicio, las diferentes empresas deberían cobrar un precio similar para un plazo igual, lo que nos arroja una banda de precios que son justos y razonables. Es muy similar a la idea de que para productos similares, los precios deberían ser similares.
Enron fue un ensayo de búsqueda de control de precios de mercado, todo lo contrario de lo que es un precio justo. Tristemente hoy los grandes bancos hacen exactamente eso, pues ya Coca Cola en el pasado se quejó de que Goldman Sachs controlaba los precios de los metales.
La evidencia objetiva
Para contrarrestar fraudes con las prácticas mencionadas anteriormente se diseña en los EUA el vendor-specific objective evidence (VSOE), un método para reconocimiento de ingresos que cumple con lo requerido por lo dispuesto en SOP 97-2 and SOP 98-9 del American Institute of Certified Public Accountants (AICPA). Puede verse más información sobre VSOE en los siguientes enlaces:
- What’s the Big Deal about VSOE?
- Why VSOE Spells Trouble
- Software Revenue Recognition A Roadmap to Applying AICPA Statement of Position 97-2
También se suscribe la ley Sarbanes Oxley (abreviada como SOX) que pretende evitar un poco la falta de controles contables.
El problema de hablar de "evidencia objetiva" es que al final VSOE o la ley SOX terminan siendo sólo una regla más. Cuando no atiendes la causa raíz de un problema, el problema persiste. Poner un parche y negar el problema, reducir los síntomas en lugar de neutralizar la causa, no resuelve nada. Actualmente las organizaciones de todo tipo, guiadas por incentivos aberrantes, con reglas contables llenas de vacíos legales y gente sin valores morales, no van a dejar de producir fraudes organizacionales porque exista el VSOE.
Dice el dicho en inglés "law without enforcement is void" (la ley que no se vigila es palabra muerta). La ley está escrita, pero las personas, regidas por sus valores son los que interpretan y aplican la ley. Cuando el sistema de leyes no es una extensión de los valores morales, las leyes serán burladas, porque la ley es apenas un juego de palabras. Los valores morales determinan la conducta humana, y si quisieran deshacerse de los fraudes, tendrían que reinstaurar la moralidad, o tendrían que dejar de usar personas. Y en casos como Enron, habría que reemplazar a toda la organización, empezando por su alta dirección.
No va a dejar de haber control de precios de mercado o fraudes financieros porque exista el VSOE o la ley SOX. Y si no hay que ver el control de precios del petróleo en Egipto por parte de los bancos que desencadenó la primavera árabe en Egipto, El control de precio de los bonos griegos que empeoró junto con la desinformación mediática, la innecesaria crisis de Grecia. Podemos ver a Coca Cola quejándose de que Goldman Sachs controla el precio de los metales, o podríamos pensar en el control de precios de carbón en España por parte de Goldman Sachs (El carbón colombiano que desata la ira de los mineros españoles).
¿Por qué sucedió Enron?
El caso Enron tuvo lugar gracias a la avaricia individual y colectiva, la arrogancia corporativa, las emociones de los inversionistas guiados por las agencias calificadoras, los medios, los analistas. Vino de prácticas financieras riesgosas, falta de transparencia, metas agresivas de ganancias, excesivo interés en el precio de las acciones. Los fraudes financieros van en aumento. Los incentivos para cometer fraude siguen allí y nadie está interesado en abolirlos o prohibir los mecanismos que estimulan y premian el fraude. La falta de valores morales hace que la gente sea más propensa a participar en esquemas de fraude masivo. Hace poco hubo un gran robo al banco con personas de muchos países (India y el gran robo al banco).
Cuando pretendes que un sistema sea seguro, el eslabón más débil de la cadena es el ser humano, y en este caso son los valores morales de los que las personas manejan el dinero de los inversionistas, lo que determinará cuan segura será una inversión. Una cadena es tan fuerte como su eslabón más débil. Puede establecerse prohibiciones y controles, pero sin personas con valores morales, es letra muerta. ¿Acaso no querrán los inversionistas empezar a promover un poco más los valores morales, en lugar de los antivalores y el relativismo moral que hay hoy que hoy se predican? Es que se ocupa la misma falta de ética para quitarle el dinero a un pobre, que para robar a un inversionista.
Lo que está diseñado para fallar, fallará, tarde o temprano. Los inversionistas tienen una elección que hacer, un cambio cultural que empezar, y su dinero está en juego. Los valores morales son para gente con mentalidad cuadrada, hasta el momento en que le vayan a robar sistemáticamente a los inversionistas también (algo que ya han empezado a hacer). Allí si reclamarán la falta de valores morales. Y tristemente los inversionistas serán los idiotas en la nueva era. Ya lo fueron cuando ocurrió lo de los CDOs sintéticos, y es esperable que lo sean de nuevo.