¿Alguna vez te has preguntado cómo escriben los discursos en la política y en la economía? Hemos escuchado discursos del FMI, BCE, algunos economistas en medios mainstream que dicen las recetas de siempre que nunca funcionan. Hemos visto agencias calificadoras dando rating AAA a los créditos subprime. Hemos visto a Bernanke predecir todo lo contrario de lo que ocurrió. ¿Cómo hacen para que la gente no se les llame idiotas y para el mundo no deje de escucharles? Para ello tienes que entender su manera de escribir y de hablar.
En caso de que estés parado y quieras buscarte un empleo en la política, o en organizaciones como en el FMI, el BCE, OECD, agencias calificadoras, etc. he aquí una guía de cómo hablar ante los medios de comunicación, de modo que puedes decir la burrada que se te ocurra, y nunca quedarás mal ante otros, siempre y cuando sigas la estructura.
Cada párrafo que escribas tendrá cuatro partes:
- Una oración que use la sabiduría ordinaria y convencional, las frases de siempre, cosas triviales, o simplemente puedes decir un disparate.
- Una oración de advertencia para cubrirte en caso de que no se cumpla esa oración.
- Una oración donde dictas una política usando las fórmulas de siempre, las de no hacer nada o las de no cambiar nada o las de dictar medidas que favorezcan a los más poderosos, o simplemente decir un disparate.
- Una oración de advertencia para cubrirte en caso de que la política no funcione para la gente (que es lo más probable).
Por ejemplo:
- Hemos hecho lo correcto para recuperar la economía y el empleo al favorecer una mayor competitividad.
- No obstante hay factores imprevistos y riesgos de entorno económico mundial que podrían echar abajo esta recuperación.
- Para que nuestra iniciativa tenga éxito y provoque una recuperación, debe ir acompañada de una reducción drástica de salarios en el sector público y privado para fortalecer la competitividad.
- Pero vale advertir que aunque se logre una mayor competitividad, la recuperación del empleo puede ser gradual, llena de tropiezos y vaivenes, con bandazos pequeños hacia arriba y grandes hacia abajo, por lo que todavía podría haber tiempos difíciles adelante.
¡¡Por una retórica absurda mejor para todos!!