¿De donde surgen las leyes de propiedad intelectual? ¿Ayuda al desarrollo tecnológico y protege a los que empujan el progreso, o por el contrario protege a monopolios y destruye el desarrollo tecnológico de un país? ¿Son las leyes de propiedad intelectual una cosa obsoleta que necesita reinventarse o abolirse para ajustarse a la modernidad? Para respondernos estas preguntas ocupamos escudriñar la historia, analizar los problemas, cuestionamientos y desafíos de una propiedad intelectual obsoleta y llena de defectos, que algunos grupos de lobby anuncan como "buenos".
La propiedad intelectual
Cuando hablamos de propiedad intelectual hablamos de propiedad sobre las ideas. Es un concepto extraño para nosotros los hispanoparlantes y también para los asiáticos.
Hay varias formas de propiedad intelectual:
- Patentes (patent) de invención
- Marca registrada (trademark) y secreto comercial
- Copyright
El concepto de copyright, que es la forma más común, es un término legal que da al creador de un trabajo original el derecho exclusivo de uso, generalmente por tiempo limitado. Se entiende como "derecho de copiar" y también el derecho a que se le nombre como el autor, a que determine quién puede adaptar su trabajo, quién puede llevarlo a la práctica, quién puede beneficiarse financieramente de ello. El copyright se aplica a cualquier forma expresable de una idea o información sustantiva y discreta, y de allí que tenga roces con la libertad de expresión y libertad de prensa, que también se refiere a expresión de ideas o información.
Típicamente el copyright dura toda la vida del creador, sumándole de 50 a 100 años tras su muerte, o un periodo finito para creaciones anónimas o corporativas. ¿Puede una corporación realmente crear algo o debería atribuirse la autoría a las personas que realmente crearon o contribuyeron para crear lo que está sujeto a copyright? Ya por allí tenemos un potencial de controversia. Suele ser un tema de carácter civil, pero en algunos lugares tiene carácter penal.
Periodo anterior a 1710
Al principio el copyright se diseñó para restringir la impresión de publicaciones, aunque hoy se diga que sirve para proteger a los autores. Antes de 1710 en Reino Unido las restricciones de copia estaban reguladas por el Licensing Act. Las restricciones eran vigiladas por el Stationers' Company, un gremio de imprentas que tenía el poder de imprimir y la responsabilidad de censurar trabajos literarios.
In 1557 the Stationers' Guild received a Royal Charter of Incorporation which gave them an even greater authority over the trade. As a result of this Charter, nobody could print anything for sale within the kingdom unless he was a member of the Stationer’s Company unless he was exempt through some privilege or patent. It gave the government considerable influence over the type of books which could be published as in for example, the time of Queen Mary when royal proclamations prevented the publishing of protestant or other heretical books.
Fuente: The Stationers’ Company
Ya por allí viene una primera demostración del poder para coartar la libertad de expresión. La censura llevó a protestas públicas. El Licensing Act se renovaba cada dos años, los autores querían prevenir su renovación, y en 1694 el Parlamento se rehusó a renovarle, lo cual terminó con las restricciones de prensa y el control y monopolio de Stationers' Company.
Por 10 años Stationers' Company defendía repetidamente los intentos de pasar leyes que restauraran el viejo sistema, pero el Parlamento rechazaba los proyectos de ley. Como fallaron en eso, decidieron usar como argumento los beneficios de dar licencia a los autores, en lugar de a los publicadores, y finalmente lograron que se considerara su propuesta.
Si vemos lo que tenemos hoy, podemos ver que MPAA y RIAA vemos que se trata de grupos privados de publicadores que imprimen obras, a cargo de la vigilancia, similar al Stationers' Company. Realmente los autores no tienen gran participación en sus campañas de cacería humana en los EUA y últimamente sobre Megaupload.
El Statute of Anne
El Statute of Anne fue una ley del Parlamento británico que fue el primer estatuto que regulaba el copyright por medio del gobierno y las cortes en lugar de grupos privados.
Este estatuto no se aplicaba a las colonias en el continente americano, aunque algunos catedráticos así lo afirmen. La economía de las colonias era principalmente agrícola y el copyright tenía una importancia prácticamente nula. Y así, se implementa sólo tres leyes de copyright antes de 1783. Dos de esas estában limitadas a una duración de 7 y 5 años.
Leyes de copyright en EUA
A lo largo de los años EUA ha tenido distintas leyes:
- Copyright Act de 1790: El copyright dura 14 años con renovación de 14 años.
- Copyright Act de 1831: Extiende el plazo a 28 años con 14 años de renovación
- Copyright Act de 1909: Extiende el plazo a 28 años con 28 años de renovación
- Universal Copyright Convention: Es un tratado desarrollado por UNESCO que se aprueba en 1954 y 1971 como alternativa al Berne Convention.
- Copyright Act de 1976: Extiende el plazo a 75 años de vida del autor y otros 50 años, provee copyright extendido a obras no publicadas, y contiene muchos elementos de la doctrina de la ley de copyright.
- Berne Convention Implementation Act de 1988: Establece copyright de trabajos de EUA en los países que suscribieron el Berne Convention.
- Copyright Renewal Act de 1992
- Uruguay Round Agreements Act (URAA) de 1994: Establece copyright en EUA para algunas obras extranjeras.
- Copyright Term Extension Act de 1998: Estiende plazos entre 95 y 120 años, ás un plazo de 70 años
- Digital Millennium Copyright Act de 1998: Criminaliza las infracciones de copyright.
Además, hay algunos tratados que afectan la ley de copyright de EUA:
- Berne Convention for the Protection of Literary and Artistic Works
- Universal Copyright Convention
- Agreement on Trade-Related Aspects of Intellectual Property Rights
En el artículo 1, sección 8 de la constitución de EUA se indica que el propósito de la ley de copyright es "promover el progreso de la ciencia y artes útiles, al asegurar tiempos limitados a autores e inventores el derecho exclusivo sobre sus escritos y descubrimientos". Si Colón descubrió América, ¿debería él tener monopolio sobre los indígenas? Si se descubre una cura contra el cáncer, ¿debería alguien tener el monopolio?
Un Stationers' Company moderno
El argumento que suele usarse para defender el copyright indica que en textos escritos, terceros pueden expresar la misma idea de un autor mientras no expresen de forma literal las ideas. Pero ¿y si se trata de una canción? La letra que se canta es siempre la misma y las notas son las mismas. Significa que no puedes cantar o silbar tu melodía favorita con tu expresión literal de la melodía. En las demandas sobre el tema musical, ya no basta la literalidad, sino que basta la mera similitud.
Bright Tunes demandó a George Harrison por plagio musical porque la melodía de "My Sweet Lord" era muy similar a "He's So Fine" de Ronald Mack en 1962 por The Chiffons. Harrison fue multado por "plagio inconsciente" provocado por criptomnesia (proceso por el cual se vuelve consciente una imagen mnémica que no es reconocida primariamente como tal, lo que sólo ocurre eventualmente de manera secundaria, por la vía del reconocimiento a posteriori o del razonamiento abstracto). Se dice que la criptomnesia suele estar presente en casos de plagio involuntario.
El problema que presenta el concepto de "similitud" es que es muy subjetivo, pues depende del criterio de similitud. Por ejemplo, imaginemos que las palabras están compuestas por notas musicales y cada letra de la palabra es una nota. Las palabras "parlante" y "palanca", poseen "pa" y "lan" y comparten 5 letras en común, y al compararse con "palanca" que tiene 7 letras, podríamos decir que tiene un 71% de similitud, y al comparase con "parlante" hay 62% de similitud, aunque ambas palabras tengan una semántica completamente distinta. De esta manera, usando criterios de similitud, "parlante" es plagio de "palanca" (o viceversa) aunque no tengan nada que ver y no haya literalidad.
Si pensamos que las letras son notas, ¿cómo distinguimos si dos melodías son similares o distintas? Al final al otorgarse monopolio sobre una idea y todas las que sean subjetivamente similares, se deja un margen muy reducido de posibilidades para innovar o siquiera para expresar.
Cuando vemos la música o el cine, RIAA y MPAA son entes privados que vigilan el copyright. RIAA y MPAA representan a los "publishers" (los que publican) que son en cierto modo las imprentas modernas de música y películas, y no son los autores, el Stationers' Company moderno. Cuando vemos los juicios por copyright generalmente vemos a los publishers detrás de ello, como fue el caso del jucio de EMI, Universal Media Group contra Grooveshark por el no pago de regalías.
PRS un ente privado que es como un RIAA británico, amenazó con demandar a Sandra Burk, una mujer británica por cantar en su trabajo una canción sujeta a derechos de autor mientras trabajaba. Se echaron atrás en las amenazas tras la publicidad negativa, pero quedaron claros los efectos negativos de la propiedad intelectual sobre las libertades civiles (British Copyright Org Threatens Singing Store Employee, Then Apologizes).
El caso del cierre de Megaupload a manos de RIAA y MPAA (El incidente Megaupload y sus bemoles sociales) ha demostrado el poder del Stationers' Company moderno, y las protestas contra las leyes SOPA y PIPA (Efectos de ley SOPA y PIPA) nos recuerda las protestas contra el Licensing Act. La historia se repite.
Con todo lo que hemos visto, entendemos que seguimos teniendo un Stationers' Company como en tiempos anteriores a 1710, y que la ley de propiedad intelectual termina siendo obsoleta, aunque la anuncien como un novedoso Bálsamo de Fierabrás reinventado. Queda claro que la lucha de la Stationers' Company revisitada que nos empuja un Licensing Act extraterritorial planetario que viola la soberanía de los países, no es más que un intento de proteger un modelo de negocios obsoletos que en 300 años se ha negado a evolucionar y que sataniza a sus oponentes usando discurso patético (derivado de pathos, manipulación emocional). Y a como sigamos funcionando igual, tendremos los mismos problemas de hace 300 años.
Tecnología: La amenaza de los patent sharks
La efectividad del copyright es cuestionable, pues un estudio académico alemán concluye que el copyright amenaza la proliferación de conocimiento y el progreso de la ciencia. Un historiador alemán alega que la masiva proliferación de libros debido a la ausencia de leyes de copyright durante el siglo XIX, y el conocimiento derivado, sentó las bases para el poder industrial alemán.
Höffner has researched that early heyday of printed material in Germany and reached a surprising conclusion -- unlike neighboring England and France, Germany experienced an unparalleled explosion of knowledge in the 19th century. German authors during this period wrote ceaselessly. Around 14,000 new publications appeared in a single year in 1843. Measured against population numbers at the time, this reaches nearly today's level. And although novels were published as well, the majority of the works were academic papers. The situation in England was very different. "For the period of the Enlightenment and bourgeois emancipation, we see deplorable progress in Great Britain," Höffner states.
Fuente: No Copyright Law. The Real Reason for Germany's Industrial Expansion?
¿Acaso no se suponía que la propiedad intelectual ayudaba a la innovación y al progreso? parece que la historia demuestra lo contrario.
Harvard Business Review denuncia que las empresas tecnológicas enfrentan una seria amenaza empujada precisamente por las leyes de propiedad intelectual, conocida como los patent sharks, depredadores que coleccionan patentes mediante adquisiciones en casos de bancarrota, acuerdos de licencia y otros, con el fin de demandar a cualquier empresa que sin querer viole su patente.
Recently, though, technology companies have been attacked by patent sharks, firms with hidden intellectual property that surface, threatening to sue, when their rights are inadvertently infringed. Most of the time, the assault comes out of the blue from an unknown source, and enterprises usually aren’t able to identify their opponent until it is too late for them to react. What’s more, their traditional line of defense, designed for taking on visible competitors, is completely unsuited for this type of guerrilla warfare.
To avoid shark attacks, companies will have to go beyond relying on legal remedies. They’ll also need to move away from amassing huge patent portfolios for cross-licensing with competitors; develop smarter, simpler standards and design more-modular components; cooperate earlier with competitors; make sure that functional groups within and among firms share information about shark attacks; and abandon the practice of filing for patents on ever smaller, less significant inventions. In other words, they’re going to have to turn their R&D processes inside out.
Fuente: Harvard Business Review: Patent Sharks
Otros autores y sitios web se han referido a la situación también:
Patent trolls (or sharks) are patent holding individuals or (often small) firms who trap R&D intense manufacturers in patent infringement situations in order to receive damage awards for the illegitimate use of their technology. While of great concern to management, their existence and impact for both corporate decision makers and policy makers remains to be fully analyzed from an academic standpoint. In this paper we show why patent sharks can operate profitably, why they are of growing concern, how manufacturers can forearm themselves against them, and which issues policy makers need to address. To do so, we map international indemnification rules with strategic rationales of small patent-holding firms and large manufacturers within a theoretical model. Our central finding is that the courts’ unrealistic consideration of the trade-offs faced by inadvertent infringers is a central condition for sharks to operate profitably.
Patent sharks or trolls are entities that—opportunistically or intentionally—profit from payments by companies that inadvertently infringe on the sharks’ IP rights simply because they never even knew those rights existed. Though the patent sharks’ activity is perfectly legal, companies must understand that they are extremely dangerous and can cause a great deal of financial harm. They sometimes hold patents based on their own inventions, but an increasing proportion license in, or acquire patents that they can then turn against companies. This kind of business is not only growing in importance, it’s also attracting more venture capital than it has in the past, according to Buckmaster de Wolf, senior counsel of litigation and legal policy at General Electric…
Fuente: Predatory Business Practices: Patent Sharks…Patent Trolls
Potential sharks are presented as small firms with no manufacturing activities, which hold (mostly) technologically unsophisticated patents. When products are complex (i.e. encompass multiple patentable technologies or components), this increases the likelihood that manufacturing firms will focus their monitoring efforts on a set of core technologies or components and therefore inadvertently overlook existing patents on complementary technology. The authors show that under such circumstances, patent sharks have incentive to hide their patents in dense patent thickets until infringement occurs, because it is more profitable to “be infringed” than to enter into ex ante licensing negotiations with a potential infringer.
La propiedad intelectual se presta para lo inconcebible: Ser demandado por inscribir una patente, o dicho de otra manera, patentar la patente que otro inscribe, como aparentemente ocurrió en 2010 (The Ultimate Patent Troll Patent: Get Sued When You File A Patent).
Y entonces recordamos lo que dijo Thomas Edison en 1898:
Las operaciones de un patent shark empujan al inventor a obtener patentes de artículos que no se supone que sean colocados en el mercado. Un colega consigue una máquina y alguien más llega, y al sacar patentes para ciertas partes puede molestar mucho al inventor y hacerle pagar bien, aún si el inventor consigue su fin.
¿Qué habría ocurrido si el que inventó la rueda, tuviera la patente y la exclusividad? ¿Qué habría ocurrido si el que inventó los ceros y unos digitales, tuviera la patente y la exclusividad? No tendríamos vehículos ni computadoras. Los automóviles tendrían que usar patas o ser tirados por animales. Sólo podría haber computadoras mecánicas sin memoria alguna.
En la era donde RIAA y MPAA (los maestros del control) se enfrentan a las empresas de Internet (los amantes de la libertad y la tecnología), y donde ya sabemos que las leyes de propiedad intelectual son refritos del Licensing Act, ¿queda alguna duda de la obsolescencia de las leyes de propiedad intelectual? ¿Ayuda la propiedad intelectual al desarrollo tecnológico y protege a los que empujan el progreso, o por el contrario destruye el desarrollo tecnológico de un país? ¿Son las leyes de propiedad intelectual una cosa obsoleta que necesita reinventarse o abolirse para ajustarse a la modernidad? ¿Es válido pensar que haya control y propiedad sobre las ideas, y todas las demás ideas similares por parte de determinados grupos? En este momento, el lector ya podrá imaginarse la respuesta.