Hay muchos tipos de compradores de coches. De ahí que existan multitud de modelos y precios.
Haciendo un resumen simplista se podría decir que existen dos clases de compradores:
- Los que consideran que son el coche en el que van subidos. Venderían el alma al diablo o las joyas de la abuela para tener el coche más molón a su juicio cueste lo que cueste.
- Los que creen que el coche es una herramienta para cubrir ciertos fines o necesidades: ahorro de tiempo respecto al transporte público, mayor libertad de movimiento... Una cara y futura chatarra que chupa la sangre a su dueño a cambio de unas prestaciones determinadas. Sólo buscan un vehículo que cubra su necesidad al menor precio posible.
La apuesta de Tesla es valiente y por ello merece triunfar. Pero yo estoy en el otro lado. Soy el posible comprador. Si tengo que pagar 35.000 dólares el coche ha de ser útil para todo lo que me sirve un coche convencional. Desplazamientos cortos habituales y largos excepcionales. Si no es así esperaré a que evolucione y mientras tanto me quedaré con lo que hay: Otra cosa sería que fuera más baratillo y ello me llevara a aceptar el sacrificio de la baja autonomía. Cuando llego a una gasolinera y tengo cuatro coches delante me desespero un poco. Si me pasa lo mismo tres veces en 1.000 Km con un eléctrico y una espera mucho mayor igual me quedo sin uñas. Luego habrá que tener en cuenta lo que dice que dura y lo que dura de verdad como sucede con las baterías de los móviles o lo que durará cuando tenga cinco años.
El Sr. Almizcle es muy bueno vendiendo cosas que todavía no tiene y por ello es imposible contrastar su eficiencia. Asunto un tanto complicado confiar en la palabra de un vendedor. Él es muy bueno vendiendo pero yo soy un comprador muy perro, sobre todo si tengo otras opciones. No le voy a comprar algo que no puedo contrastar. Podría llegar a comprárselo si el precio fuera muy goloso, pero jamás le entregaría una cantidad a cuenta sin que me diera un aval algo más válido que su palabra, por si se da el caso de que decida desaparecer con la pasta o que lo que entregue no se corresponda con lo acordado.
Entregar una cantidad a cuenta al toque de trompeta de un señor que parece muy majo no me parece planificación sino impulso irracional.
Me cuesta entender que haya gente capaz de pasar un día en una cola para comprar un tontófonfo, cuando puedes llevarte otro por precio parecido que hace cosas similares en el acto. Paro hacer una cola de por lo menos año y medio y encima poner dinero me supera completamente.
Los que no vemos tres un un burro, a veces nos da por darle al coco y conseguimos algunos modestos logros.
Aparte de eso tirarle fotos a algún que otro documento alguna vez me ha resuelto algún que otro apuro.
En mi casa cada uno se responsabiliza de vaciar sus propios bolsillos desde hace tiempo. El operador de lavadora se declara completamente irresponsable. Lo que no ha impedido que hace ya bastantes años haya rescatado de la lavadora un cupón premiado hecho una pelotilla. Mil pesetillas de las de antes. No jode pero atormenta bastante. Pudo ser peor.
Si que sale el número en la tarjeta europea. Tercera línea, a la derecha.
Je,je. Te propongo que te pases a la tecnología y abandones la lupa decimonónica.
Tírale una foto con el móvil y dale al zoom.
