Lo mejor es que no tengamos que preocuparnos por nada de esto, porque continuemos viviendo en un país estable, previsible, más o menos unido, y con una fiscalidad todavía no tan confiscatoria (aunque dura). Lo cual depende de las próximas elecciones. Esto es mucho mojarse y me pueden llover palos, pero allá voy:
- Gobierno Podemos: véase Grecia. Posible default/corralito/salida del euro. Escenario en el que hay que preocuparse sobre el tema de este hilo. Recesión al 2º año y siguientes. Buen escenario para los separatistas, problema que Grecia no tiene.
- Gobierno PSOE+Podemos: fiscalidad confiscatoria, no salida del euro ni corralito, pero muchos problemas con Europa por algunas medidas. Ya no es la catástrofe que estamos discutiendo cómo paliar, pero nos costaría mucha pasta en impuestos y a muchos de nosotros también pérdidas en las inversiones. Recesión poco probable antes de 4 años, con la buena inercia que llevamos ahora. Pero después de un año habría estancamiento en vez de crecimiento, por efecto de la contrarreforma laboral, mayor gasto público, etc. Buen escenario para los separatistas, impulso federalista que les favorece porque en España se confunde el federalismo con el confederalismo, tema que si queréis explico aparte.
- Gobierno PSOE: fiscalidad más elevada que la actual, para rentas medias y altas. Buen rollo con Europa, recordemos a ZP y lo sumiso que fue. Crecimiento por inercia del actual, durante un año o dos, después estancamiento por efecto de la contrarreforma laboral, etc. Buen escenario para los separatistas si el PSOE necesita su apoyo (federalismo); si no, neutral.
- Gobierno PP, Gobierno Ciudadanos, Gobierno PP+Ciudadanos: fiscalidad algo inferior a la actual, probables exenciones en Impuesto de Patrimonio y en Sucesiones, salvo para los ricos-ricos. Buen rollo con Europa, como estamos viendo estos años. 4 años de buen crecimiento, por inercia actual y alguna nueva reforma. Mal escenario para los separatistas.
Para quien posea un mínimo de patrimonio que proteger, la última (PP/Ciudadanos) es la mejor opción, en cualquiera de sus 3 variantes. Quizás ideal la 3ª de ellas, por el impulso renovador que traería Ciudadanos. Ciudadanos con mayoría no lo veo posible, no tienen estructura para conseguirlo. Tampoco Podemos la tiene.
Muchos estaréis en desacuerdo, pero para quienes lo veais como yo: cómo podemos ayudar a que salga un gobierno PP+Ciudadanos?
Pues teniendo en cuenta los efectos de la ley electoral, votar a Ciudadanos en circunscripciones pequeñas favorecería al partido de izquierdas que fuese mayoritario. Ejemplo: normalmente en Ávila el PP saca 2 diputados y PSOE uno, pero un cierto trasvase de votos de PP a Ciudadanos puede tener el curioso efecto de que el PSOE pase a 2, PP uno, Ciudadanos cero. Tanto Ciudadanos como Podemos tienen opción de sacar un diputado, pero es muy poco probable. En cambio en Madrid y Barcelona no hay ese efecto, y el porcentaje de escaños se parece al de votos. Por eso las elecciones europeas da un resultado más fiel, al ser circunscripción única. En Sevilla o Valencia también, aunque menos.
Por tanto: recomiendo que quien viva en Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia, Alicante, vote PP o Ciudadanos. (En la duda, PP, porque Ciudadanos no aspira a ser el partido más votado, y de todas formas ya le va a votar un cierto porcentaje de personas que votaron PP en 2011 pero ahora lo odian). En el resto de provincias, quien no sea rotundamente de izquierdas debería votar PP. Insisto: eso si lo que les preocupa principalmente es pagar menos impuestos y que vivamos la mejor coyuntura financiera posible durante los próximos años. (Entiendo que quien participa de este hilo es porque tiene esas inquietudes, por encima de "Rajoy no, qué asco le tengo" o "fuera la casta"). El escenario ideal, de entre los que tienen visos de realizarse, es un PP con 140 a 150 escaños (una encuesta del otro día les da 131) y Ciudadanos con 30 a 40 (23 en esa misma encuesta.) Me valdría igual Ciudadanos 150 - PP 30, pero es que esa posibilidad no la veo ni de lejos.
Esta es mi opinión sobre cuál es la opción menos mala que tenemos, considerando escenarios probables.
No es que me entusiasme ni que yo vaya a votar feliz, conste.