¡Ay, qué cierto es cómo añoramos nuestra casa cuando estamos fuera! Ni la mejor cama del mejor hotel se puede equiparar a nuestra camita de diario.
Y mira que nosotros estamos sufriendo un colchón que parece más de fakir que de persona normal, jajaaaa.
Ahora nos hemos quedado peladitos con las obras, pero en cuanto alcemos el vuelo y resurjamos de nuestras propias cenizas como el ave fénix, ;-), de las primeras cosas que voy a comprar son colchones, sí, dos, para una cama nido, o como se llamen. Me da que tienen que ser mucho más prácticas que la grande, que para moverla, buf.
Desde que uso el i-robot, la muevo menos, pero de todas formas, me rompo la espalda al hacerla.
Hoy he dormido medianamente bien, ya tocaba, pero pasando frío. Aquí o no duermo por el calor o duermo con el aire acondicionado y lo tengo suavísimo en el dormitorio, pero a pesar de ello, me quedo congelada. ¡Qué artificial es!
Verás que con la lluvia, despeja el ambiente y refresca. ¡Aprovecha!
Un abrazo y ¡feliz día!
¡Sed felices!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.