Después de haber soltado una sonora carcajada por la manía que me ha entrado con Fede, oye, que se nota que ya me hacía falta reírme a mandíbula batiente, que llevaba muchos años con la sonrisa fingida y llega un momento que los palillos de dientes duelen, clavaditos en los mofletes, ;-)
Acaban de llamarme de Banco Madrid, de la oficina de Bilbao. Ni les conocía y muy maja me ha parecido la chica. Ale, a seguir haciendo números, ;-)
Sí, dos generaciones agarrando papelitos me confirma lo que dices, acabas con una buena cartera, amortizadísima, pero luego y ahí radica uno de los peligros gordos de estas carteras gordas, si has mamado ser eternoplacista, cambiar el chip cuesta mucho, sobre todo, a cierta edad y si vendes a ciertos precios miserables. No obstante, como te dije ayer, poco a poco, este año mucho más, voy intentando cambiar mi mentalidad, ya que al no ver una generación posterior, pienso el que venga detrás que arree...
No, no muevo ninguna cotización, como mucho la fuente para que me salga un pilpil espesito, nada más. Hay que ser realista.
Sin llegar a influenciar en el mercado, obviamente, tengo que pensar en las fluctuaciones que éste tiene en los últimos años y en los futuribles venideros, algo que sí tiene una influencia en mí y me importa mucho, ya que se trata de mi salud, que es de la que vivo, fundamentalmente, ;-)
La venta da liquidez, bien, mas también hay que pensar, hasta qué punto te hace falta más liquidez y si te es rentable, que esa es otra. Mucha liquidez sale cara.
Hablas de si la cotización desciende suficientemente, claro, nos ha fastidiado, ese es mi problema, en un ambiente alcista, es complicado volver a colocar la liquidez. Ahora mismo veo IBE "caro", a pesar de que mi mente y mi corazón me digan que es un buen precio de entrada. Como eliminen o disminuyan drásticamente los divis, mi precio tardará en llegar.
Así que estoy por buscar otras alternativas a mi liquidez, momentáneamente o por lo menos con unos plazos medios decentes.
Otro de mis problemas, que lo veo con frecuencia entre las amistades inversoras es la adaptación al microcosmos económico actual. Lo que decíamos, cada persona es un mundo y sus formas de invertir, también pueden ir cambiando con el paso del tiempo.
Mi cartera está aquí y allí y acullá. Diversificada y tan rotada que a veces la veo hasta con cara de mareo y todo, jajaaaa
En cuanto a algunos que quieren abrir negocio, mi mente ahora mismo me lleva por otros derroteros, no lo puedo evitar. Lo siento. Las cosas claras y las sociedades espesas, ;-))
Abrazo numérico, cambiante, versátil...
¡Sed felices!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.