Dos supermercados de Badalona venden a mitad de precio la comida a punto de caducarse
En la sección de carne, pescado, verdura y lácteos del Carrefour de Montigalà hay cuatro pequeños espacios reservados para productos a punto de caducar. Los que había este miércoles en los estantes caducan entre el jueves y el sábado. En lugar de retirarlos de la venta, como sería habitual, en este supermercado los han marcado con un distintivo especial, indicando que la fecha de caducidad está próxima, y se venden a mitad de precio.
Interior de uno de los supermercados donde se lleva a cabo la innovadora experiencia, en Badalona. JORDI PUJOLAR / ACN
El objetivo es dar una salida rápida a este tipo de productos para evitar tirar comida y posibilitar así el consumo entre las familias más necesitadas. Los responsables del establecimiento aseguran que la campaña es un éxito y que muchos días estos productos se terminan a las once de la mañana, apenas una hora después de abrir las puertas de la tienda.
Esto ocurre, sobretodo, con la carne. Este miércoles a las nueve y media de la mañana sólo quedaban algunas bandejas de cordero y ternera. "Nos sorprende ver las neveras vacías cada noche", afirma el director regional de los centros Carrefour de Cataluña, Jesús Inarejos. "Son productos que están en perfecto estado", asegura.
Según las estimaciones que hacen los responsables de esta tienda, un 50% de los productos que se ponen a la venta bajo el epígrafe 'Producto fresco para consumir hoy' se está vendiendo. "Estamos minimizando muchísimo el hecho de tirar alimentos", se felicita.
Una franquicia de Condis también se ha sumado a la campaña 'En Badalona no se tira la comida', que ha impulsado el Ayuntamiento de la ciudad. La campaña tiene su origen en una moción aprobada en el pleno municipal, donde se pedía que se establecieran convenios de colaboración con establecimientos de alimentación para buscar fórmulas para reducir el despilfarro de alimentos.
EL BANC DELS ALIMENTS, TAMBIÉN
Otro de los aspectos solidarios de esta iniciativa es la donación que se hace al Banc dels Aliments. Los supermercados adheridos recogen productos que no se pueden poner a la venta porque, por ejemplo, se ha roto el embalaje. Si el alimento está en buen estado, lo almacenan y se destina a fines solidarios.