Política monetaria

La política monetaria es, dentro de la política económica, el conjunto de actuaciones que las autoridades llevan a cabo en lo relativo al sistema monetario. Con estas actuaciones, entre otras, estas autoridades tratan de preservar la estabilidad de precios y el crecimiento económico.

La función de un Gobierno es, entre otras, administrar la economía. Para administrarla, el Gobierno aplica una serie de políticas, lleva a cabo una serie de actuaciones a las que, conjuntamente, denominamos como "política económica".

Toda actuación que lleva a cabo un Gobierno o un banco central en lo que respecta al ámbito económico, lo hace a través de la política económica.

Pero la política económica, dado que hablamos de una disciplina muy amplia, se divide, a su vez, en dos mecanismos mediante los que las autoridades controlan la economía y, mediante esa intervención, la guían en función de los objetivos que se persiguen.

Estos mecanismos de los que hablo son la política monetaria y la política fiscal, y en este artículo toca hablar de la monetaria.

La política monetaria, dentro de la política económica, hace referencia al conjunto de actuaciones que se centran en aspectos relacionados con el sistema monetario. Una subida o una bajada de los tipos de interés, un aumento o reducción de la masa monetaria, entre otras acciones relacionadas, se realizan desde la política monetaria.

Como veremos más adelante, esta política monetaria, posteriormente, se complementa con otras herramientas, como la política fiscal.

La política monetaria y los bancos centrales

Los responsables de aplicar o ejecutar la política monetaria en las distintas economías son los bancos centrales.

Los bancos centrales son organismos independientes del Gobierno o Gobiernos, los cuales funcionan como una institución financiera que tiene como fin supervisar y coordinar el buen funcionamiento del sistema financiero en una economía.

Este, a través de la política monetaria, cuenta con instrumentos para regular la oferta de dinero en la economía. Pues el banco central, como institución pública, gestiona la moneda de un país, por lo que puede controlar el dinero que se encuentra en circulación, que conocemos como oferta monetaria.

De la misma manera, y dado que actúa como prestamista de los bancos, encarece o abarata, a través de los tipos de interés, el dinero. De esta manera, favorece el endeudamiento y estimula la demanda en tanto en cuanto aplica una política monetaria expansiva, de la misma manera que ocurriría a la inversa si aplicara una política monetaria restrictiva.

En esencia, los bancos centrales, alineados con sus objetivos y el interés general de la población, se encargan de aplicar y controlar esta política monetaria en pro de unos objetivos que, como poco, garanticen el bienestar.

Objetivos de la política monetaria

La política monetaria, atendiendo a los objetivos que dicen tener los bancos centrales, tiene como fin una serie de funciones con las que se pretenden alcanzar unos objetivos. Pues no actuaríamos ni haríamos nada si, posteriormente, no pretendemos llegar a ningún lado.

Entre los principales objetivos que persiguen los bancos centrales con la política monetaria, se encuentra, principalmente, la estabilidad de precios. Es decir, controlar la inflación. En este sentido, hace uso de las subidas o bajadas de la tasa de referencia o tipos de interés, regulando con ello el coste del dinero. Dependiendo de si sube o baja la inflación, se aplicará un tipo de política monetaria u otra.

Otro objetivo de los bancos centrales con la política monetaria es favorecer el crecimiento económico y que este sea sostenido en el tiempo.

Por otro lado, y como otro ejemplo, la política monetaria también persigue reducir el nivel de desempleo en la economía, para lo que hace uso de sus herramientas.

En esencia, la política monetaria toca diversos aspectos económicos, relacionados con el sistema monetario, que, mejorando, podrían mejorar el bienestar.

Tipos de política monetaria

Cuando hablamos de política monetaria, no hablamos de una actuación repetitiva a lo largo del tiempo. Pues, en función de los objetivos que se persiguen, existen unos tipos de política económica que se aplicarán atendiendo a esos objetivos.

En este sentido, podemos distinguir dos tipos de política monetaria que debemos conocer:

Política monetaria expansiva: Aquella que tiene como fin estimular la economía y dinamizar el crecimiento económico. Entre las principales actuaciones en la aplicación de este tipo de política, podemos destacar la bajada de tipos de interés que hace más atractivo el crédito y fomenta la demanda.
Política monetaria restrictiva: Es aquella que tiene como fin relajar la demanda, pudiendo darse el caso de que se aprecia un crecimiento de los precios y fuera preciso reducir los niveles de inflación. En este caso, hablamos de una práctica inversa a la anterior. La actuación principal que lleva a cabo el banco central en este caso es la de subir los tipos de interés con el fin de relajar la demanda y, de esa manera, contener la escalada de los precios.

Ejemplo de política monetaria

Para terminar, veamos un sencillo ejemplo de política monetaria.

Para este ejemplo, imaginemos que tenemos una economía recalentada que presenta una creciente inflación. Los precios suben en tanto en cuanto no se incrementan las rentas. Y los bancos centrales, así como el Gobierno, se encuentran ante una situación en la que el poder adquisitivo de las familias se va reduciendo, en tanto se va incrementando el malestar.

En este escenario, y centrándonos en la política monetaria exclusivamente, los bancos centrales podrían aplicar una política monetaria restrictiva, canalizada a través de una subida de los tipos de interés, la cual encarecería el crédito y permitiría relajar la demanda y la inflación.

Como puede apreciarse, la política monetaria permitiría al Gobierno y a los bancos centrales controlar la situación, haciendo uso de esta herramienta. De esta manera, se persiguen los objetivos y se orienta la economía hacia un mayor bienestar.

Política económica: política monetaria y política fiscal

La política económica hace referencia al conjunto de actuaciones que lleva a cabo el Gobierno en una economía. Sin embargo, estas actuaciones, principalmente, se canalizan a través de dos herramientas, entre las que se encuentra la política monetaria.

Estas herramientas a las que hago alusión son la política fiscal y, como decía, la política monetaria:

Política fiscal: La política fiscal se centra en la gestión de los recursos del Estado y la Administración. A través de la política fiscal, el Gobierno controla los ingresos del Estado y, de esta manera, su capacidad para llevar a cabo medidas o estimular la economía. Una subida o una bajada de impuestos, por ejemplo, se realiza desde la política fiscal.
Política monetaria: La política monetaria, como hemos comentado a lo largo del artículo, se centra en otros aspectos, como las condiciones monetarias. En esencia, la política monetaria se centra en el precio del dinero y el dinero existente en circulación. A través de los tipos de interés y el aumento o la disminución de la masa monetaria, el Gobierno puede estimular o relajar la economía en tanto en cuanto hace uso de estos instrumentos.