Aunque el anuncio de Trump de imponer un arancel del 10% al resto de los 300.000 millones de dólares en productos chinos que faltaban no sorprende a nadie, sí fue algo inesperado para los mercados de acciones en donde sus participantes esperaban que la tregua comercial entre Estados Unidos y China durara un poco más. Ahora prácticamente todos los productos chinos entrando a Estados Unidos están sujetos a aranceles.
Incluso, el presidente Trump dijo que está dispuesto a subir los aranceles aún más si no hay progreso en las negociaciones comerciales. La frustración de Trump con el ritmo al que van las negociaciones aumentó con el regreso del representante de comercio estadounidense, Robert Lighthizer y el secretario del tesoro, Steven Mnuchin de China sin ningún avance en las negociaciones comerciales. Según los delegados de Trump, la próxima reunión se llevará a cabo a inicios de septiembre.
Varias razones ocasionaron la reacción repentina de Trump como la falta de compromiso de China para detener el suministro de ciertas drogas opioides sintéticas que han causado unas 28.000 muertes por sobredosis en Estados Unidos durante el 2017. Aparte de esto, China prometió aumentar las compras de productos agrícolas estadounidenses, pero no lo ha hecho. Por otro lado, Trump también ha incumplido con su palabra, al prometer a China que iba a levantar las sanciones contra Huawei, algo que tampoco ha sucedido.
El impacto sobre los importadores estadounidenses
El presidente Trump ha dicho una y otra vez que el sobrecoste de los aranceles lo está pagando China. Según Trump, China le está pagando a Estados Unidos miles de millones de dólares en aranceles, pero según los expertos, es en realidad el consumidor estadounidense el que está cargando con el mayor peso de los aranceles. Los aranceles no los paga el gobierno chino ni los fabricantes chinos directamente a Estados Unidos, lo aranceles son en realidad un impuesto que pagan los importadores estadounidenses cuando ingresan los productos chinos.
Cierta parte del sobrecoste lo cubren los importadores, pero en realidad la mayor parte de la carga se la pasan al consumidor final, lo cual ocasiona que los precios suban. Es por eso que tras el anuncio de Trump, las acciones de las principales cadenas de tiendas de ventas al detalle cayeron rápidamente. Las acciones de Target cayeron un 4,2%, mientras que Macy’s perdió un 6% y Nordstrom cayó un 6,2%. Otra empresa estadounidense que ha sido lastrada por los aranceles de Trump es Walmart, una de las principales importadoras de productos chinos.
Aparte de los aranceles a los productos chinos, Trump también ha impuesto aranceles a las importaciones de aluminio y acero, lo que ha reducido considerablemente el margen de ganancias de empresas como Caterpillar que construye maquinaria pesada. Los costes de producción de Caterpillar aumentaron en 70 millones de dólares durante el último trimestre y los precios de los productos fabricados de acero y aluminio subieron en un 9% durante el año pasado.
¿Qué hará la Fed ahora?
El anuncio de Trump también pone a la Reserva Federal de Estados Unidos en el centro de la tormenta. Durante esta semana, la Fed bajó los tipos de interés en un 0,25%, mientras que Trump pedía que el recorte fuera más amplio. Sin embargo, es posible que la Fed tenga que volver a bajar los tipos de interés para evitar una posible recesión a causa de la guerra comercial. De hecho, las probabilidades de que la Fed baje de nuevo los tipos de interés en la próxima reunión de septiembre aumentaron casi al 100% del 60% donde estaban antes del anuncio de Trump.
También, las probabilidades de que la Fed baje los tipos de interés en diciembre siguen aumentando. La aversión al riesgo se apodera de los mercados y es por eso que los instrumentos refugio tradicionales se vieron beneficiados tras el anuncio de Trump. El oro sube un 2,4% y llega muy cerca del máximo de seis años alcanzado recientemente alrededor de los 1.453 dólares. El yen también se fortalece frente a sus principales contrapartes y frente al dólar sube un 1,3%, siendo esta su subida diaria más amplia de los últimos dos años.
Fuerte cambio de dirección en el S&P 500
Sobre el gráfico diario del S&P 500, cortesía del broker de Forex y CFDs ActivTrades, podemos observar que el índice completa tres sesiones consecutivas cayendo e intenta romper por debajo de la media móvil exponencial de 55 semanas, alrededor de los 2.944 puntos. De continuar cayendo, es posible que el índice caiga hasta la zona de número entero en los 2.900 puntos. Por otro lado, de rebotar al alza, el máximo histórico en los 3.028 puntos podría actuar como resistencia.
Alexander Londoño,
Analista Colaborador de ActivTrades
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