La prosperidad del mundo depende de la satisfacción de un aumento constante de la demanda de petróleo hasta el infinito y más allá. Es el sistema económico basado en el crecimiento que se desarrolló con la revolución industrial y se inició con el carbón. Desde 2005 la demanda de petróleo del mundo desarrollado se ha reducido. ¿Va a seguir creciendo la demanda de petróleo mundial?
En los artículos anteriores hemos visto cómo el mundo es más dependiente que nunca del petróleo, y cómo no está teniendo lugar ninguna transición energética para reducir esa dependencia. En este artículo y el siguiente estudiaremos la demanda y la oferta del petróleo, los dos factores esenciales no solo en determinar el precio del petróleo y la viabilidad del crecimiento económico, sino también en establecer el punto de inflexión a partir del cual cada vez tendremos menos petróleo.
El precio del petróleo
El precio del petróleo viene determinado por multitud de factores, pero los tres más importantes son:
- La relación entre demanda y oferta, representada por el binomio demanda/oferta, que determina la dirección que toma el precio a medio plazo.
- El sentimiento de mercado, o la reacción de los participantes del mercado de futuros del petróleo ante cualquier cambio percibido en el flujo del petróleo, que determina las variaciones en el precio a corto plazo.
- El valor del dólar, puesto que buena parte de los participantes en el mercado del petróleo lo compran en dólares (petrodólares).
En la relación demanda/oferta, históricamente tienen lugar periodos en los que la oferta es limitante y los precios crecen, y periodos en que la demanda es limitante y los precios caen. Los periodos de estabilidad de precios se caracterizan por un crecimiento de la demanda que la oferta puede satisfacer. El sentimiento de mercado introduce volatilidad en el precio del petróleo.
Pero el petróleo se distingue de otros productos en que presenta una cierta inelasticidad en la relación demanda/oferta. La inelasticidad de la demanda se produce cuando sube el precio del petróleo y la demanda no cae, porque las economías al no tener producto alternativo, comprarán todo el petróleo disponible en una banda muy amplia de precios. La inestabilidad de la oferta se produce cuando a pesar de un precio elevado la oferta no puede aumentarse hasta que no se incremente la producción, lo que puede requerir desarrollar nuevos proyectos y crear infraestructura para perforar nuevos pozos y para llevar el petróleo al mercado. Fuente: EIA (Energy Information Administration).
Es importante destacar que los productores de petróleo no tienen poder para fijar el precio de su producto en el mercado abierto, tan solo en los contratos bilaterales. Dado que el mayor coste en la producción de petróleo suele realizarse en la exploración y desarrollo, antes de la extracción, y que una vez extraido, la capacidad de almacenamiento de los productores es muy pequeña comparada con el flujo de petróleo, los productores se encuentran a veces en la difícil situacion de verse obligados a vender su producto por debajo de los costes de producción.
La Demanda
En el análisis de la demanda, es importante distinguir entre demanda, lo que se quiere o se necesita, y consumo, lo que se consigue de acuerdo a lo que se puede pagar. El consumo por lo tanto, es demanda satisfecha, y si la demanda es superior al consumo, la diferencia constituye demanda insatisfecha o exceso de demanda, que ha sido suprimida. Mientras que el consumo o demanda satisfecha es trivial de medir, el exceso de demanda solo puede ser inferido. Sin embargo, de acuerdo a la teoría económica el exceso de demanda es el principal inductor del alza de precio en el petróleo, dado que la determinación del precio del petróleo se basa en un sistema de subasta y la historia muestra que cuando no hay exceso de demanda los precios se muestran estables a largo plazo, descontando la volatilidad.
La demanda de petróleo en el mundo ha mostrado una tendencia creciente casi continua y el crecimiento de la demanda va estrechamente asociado al crecimiento económico. Puesto que la energía es la capacidad de realizar trabajo, para que una economía crezca se requiere que lo haga su consumo energético. La relación entre incremento del consumo de petróleo e incremento del PIB es evidente. Que el incremento en el PIB es consecuencia del aumento del consumo de petróleo y no al revés viene demostrado porque la caída en el consumo de petróleo en las recesiones antecede a la caída en el PIB y la posterior recuperación del consumo antecede a la recuperación del PIB.
Cambio en porcentaje anual del consumo de petróleo mundial (en rojo) y del PIB mundial a precio constante del 2005 (en azul). Fuente: Our Finite World
Producción de petróleo mundial (en rojo) en millones de barriles diarios (mbpd) y el precio del barril de petróleo a dinero constante de 2011 (en azul). Alternando en fondo verde o blanco, las cuatro etapas de acuerdo a estas dos variables.
En la demanda de petróleo, podemos distinguir cuatro fases. Antes de 1972 la demanda era muy fuerte y el consumo crecía exponencialmente, y también lo hacía el consumo de petróleo per capita, con un precio estable de $20/b (a dinero constante 2011). Las crisis de petróleo producidas en 1973 y 1979 por el embargo tras la guerra árabe-israelí, la revolución en Irán y la guerra de Irán e Iraq consiguieron reducir la demanda y el consumo per capita gracias a los altos precios y a una nueva percepción del uso del petróleo en una etapa caracterizada por altos precios, destrucción de la demanda y por primera vez reducción del consumo. Tras el gran excedente del petróleo de 1980 se inicia una tercera fase entre 1983 y 2004 en que el consumo crece linealmente, mientras el consumo per capita se mantiene prácticamente plano a pesar del crecimiento de la población. El mundo en desarrollo incrementa su consumo de petróleo más deprisa que el mundo desarrollado, pero el aumento de producción es capaz de igualar el crecimiento de la demanda y no hay exceso de demanda, como indica un precio barato ($30/b de media a dinero constante 2011). A partir de 2005 se entra en una cuarta fase en la que apenas hay crecimiento del consumo. El mundo desarrollado empieza a reducir su consumo a la par que destruye su demanda mientras sigue la demanda creciente del mundo en desarrollo. El consumo per capita comienza a reducirse a mayor velocidad.
La producción de petroleo mundial en mbpd con el ajuste porcentual de los periodos de crecimiento. Fuente: Our Finite World
El ajuste lineal del crecimiento de la demanda en estas cuatro etapas de forma independiente muestra una reducción irreversible del incremento del consumo a largo plazo tras cada cambio de etapa. Dado que el incremento del consumo entre 2005 y 1013 ha sido inferior al 1% (0.1% en crudo + condensados convencionales, 0.4% incluyendo el petróleo no convencional), de mantenerse esta dinámica de muchas décadas, el próximo cambio será a una etapa de crecimiento negativo, es decir la demanda podría iniciar un declive irreversible. Dada la relación crecimiento de la demanda del petróleo y crecimiento de la economía, la economía mundial no podría volver a crecer hasta que se cambiara el modelo económico o cesara su dependencia del petróleo.
Hecho: Mientras haya suficiente petróleo disponible y la economía siga en crecimiento la demanda de petróleo seguirá creciendo. Sin embargo La tendencia histórica muestra que el incremento del consumo es cada vez menor, y está ya por debajo del 1%.
La demanda de petróleo en el mundo depende de forma parcialmente inelástica de su precio. Una vez que el precio se hace excesivamente alto, comienza la destrucción de demanda en forma de crisis económica que elimina las empresas y puestos de trabajo más sensibles al precio, provocando un efecto en cascada que se transmite por toda la economía a través del sistema financiero, debido al incremento de la inflación y los tipos de interés. James Hamilton ha estudiado la asociación de los incrementos del precio del petróleo y las recesiones en USA y ha mostrado que de las 12 recesiones de posguerra, 11 fueron precedidas por shocks de petróleo, y que de los 12 shocks de petróleo, 11 fueron seguidos por recesiones. Fuente: Hamilton, JD. 2011 Historical oil shocks
El hundimiento de la demanda en los países desarrollados
Cada año se añaden al mundo 80 millones de personas (el equivalente a dos veces España), la mayor parte de ellas en el mundo en desarrollo. Dado que la superficie cultivable ya no crece, su alimentación depende de un aumento de la productividad agrícola, que se basa en el petróleo (además del gas natural y el fosfato). El mundo en desarrollo se está industrializando y motorizando, lo que requiere grandes cantidades de petróleo. Puesto que la mano de obra es más barata y las inversiones más rentables, el mundo en desarrollo compite en condiciones de ventaja con el mundo desarrollado por el petróleo y es capaz de soportar precios más altos manteniendo la demanda.
Tomando como base el consumo de petróleo de la OCDE entre 1990 y 2001, cuando el mercado estaba bien suministrado a un precio muy bajo, entre $20-30/b, Sam Foucher modeló la demanda de acuerdo al método de Ye et al. (2002) de manera que definiera los niveles normales de demanda de la OCDE, que podemos ver en la siguiente figura:
Consumo de petróleo de la OCDE (mbpd, azul) y modelo de demanda nominal (rosa), con el periodo de datos utilizado (magenta). Fuente: The oil drum
En azul está el consumo real de la OCDE, con sus variaciones estacionales, en magenta el modelo en el periodo de donde se obtuvieron los datos (entrenamiento) y en rosa la demanda teórica. Como podemos ver en la gráfica, en 2002 el crecimiento del consumo se enlentece, apartándose del modelo, produciendo una falta de los niveles esperables de petróleo, que para 2008 alcanza ya los 6 mbpd (millones de barriles de petróleo por día). Esta diferencia es el exceso de demanda. Como cabía esperar de acuerdo a la teoría económica, ese exceso de demanda impulsó los precios al alza.
Al representar el exceso de demanda (petróleo que la OCDE quiere pero no obtiene) en mbpd frente al precio del petróleo (WTI) para el periodo 1990-2009 se ve que de 1990 a 2004 la OCDE se mantiene alrededor de un exceso de demanda nulo y el precio en un rango de $20-30/b, es lo que se define como equilibrio de mercado en la gráfica (zona gris clara), pero de 2004 a 2008 el exceso de demanda se va disparando, superando la capacidad de reserva de la OPEP, hasta faltar 6 mbpd, provocando que el precio del petróleo se triplique. Es la trayectoria marcada con una línea roja intermitente en la gráfica. En ese momento, junio de 2008, se produce un shock de precio del petróleo, colapsandose la demanda por recesión y hundiendose el precio (línea intermitente azul). El modelo en ese momento deja de ser válido, porque se destruye la demanda y no es posible saber el nuevo nivel de la demanda nominal sin un periodo de petróleo barato y abundante para establecerla.
Exceso de demanda de la OCDE (mbpd) frente al precio del petróleo WTI (USD). Fuente The Oil Drum
¿Qué es lo que falló para que hubiera exceso de demanda? La capacidad de reserva está definida por la EIA (Energy Information Administration) como la cantidad de petróleo que se puede poner en el mercado antes de 30 días y mantener durante al menos 90 días y fundamentalmente es la OPEP, la que lo aporta. Hasta 2002 el mercado de petróleo estuvo bien abastecido, pero a comienzos del 2002 empezó a haber un exceso de demanda que la oferta no podía abastecer. Durante dos años la capacidad de reserva fue capaz de absorber en parte ese exceso de demanda excepto por unos 2 mbpd, que impulsaban el precio al alza. En el 2004 la capacidad de reserva se redujo al mínimo y los precios empezaron a salir de rango. A partir de 2005 y sin capacidad de reserva, la producción es incapaz de satisfacer la demanda y se inicia una escalada de exceso de demanda y de precios que conduce a la crisis de 2008.
Exceso de demanda de la OCDE (en azul) y capacidad de reserva de la OPEP (en rojo) en mbpd, y precio del petróleo WTI en USD. Fuente: The Oil Drum
La capacidad de reserva de la OPEP (mbpd) fue vaciada entre 2002 y 2004 y permaneció en niveles mínimos hasta el verano de 2008, provocando un shock de precio del petróleo. Fuente WTRG Economics
Hecho: Entre 2002 y 2008 la incapacidad de la oferta en satisfacer la demanda de petróleo fue la causa del shock de petróleo de junio de 2008.
La crisis de 2008 impactó en el mundo desarrollado
Hemos visto que la OCDE sufrió un exceso de demanda en un periodo que comenzó en 2002 y que condujo a la crisis de 2008, debido a la incapacidad de la oferta de satisfacer la demanda. Sin embargo el mundo en desarrollo no tuvo problemas para obtener el petróleo que necesitaba y salvo una leve caída en 2008, mantuvo la tendencia creciente que mantenía desde el periodo de abundancia anterior a 2002.
Consumo de petróleo (líquidos totales, mbpd) de la OCDE y del resto de países. Fuente: Sam Fouchard
La conclusión es que cuando no hay suficiente petróleo para satisfacer la demanda mundial, se produce un reparto asimétrico, mediante el cual el mundo en desarrollo, fundamentalmente los países productores de petróleo, China e India, consiguen todo el petróleo que demandan, mientras que la OCDE se queda con el sobrante. Hay razones históricas y económicas por las que el reparto del petróleo es desigual cuando la oferta es insuficiente.
Las tres crisis de petróleo que tuvieron lugar entre 1973 y 1985 provocaron la mayor reducción en la demanda hasta la fecha actual. A la destrucción de demanda producida por las crisis económicas hay que añadir una nueva conciencia de la dependencia energética y de la transferencia de riqueza hacia los países productores que inició una voluntad general de reducir el consumo y aumentar la eficiencia. La reducción de la demanda, coincidiendo con el aumento en la producción por parte de algunos productores como la Unión Soviética, llevó a un exceso de oferta muy grande (conocido como the Great Oil Glut). Algunos países exportadores, fundamentalmente la OPEP, se vieron obligados a reducir la producción en un 12% al tiempo que los precios se hundían. Arabia Saudí aprendió mucho de aquella experiencia y no está dispuesta a repetir los errores cometidos entonces.
El sistema de mercado del petróleo establecido tras las crisis de petróleo de 1973-1985 fundamentalmente por USA y Arabia Saudita, principal consumidor y principal productor, devolvió una cierta estabilidad a los precios y tuvo como resultado un crecimiento lineal de la demanda global, reflejada en un aumento casi constante de la producción durante los siguientes 20 años, entre 1985 y 2005. Pero bajo este crecimiento lineal de la demanda global se ocultaba una importante diferencia. La demanda crecía más fuertemente en los países con menos consumo y más débilmente en los países con más consumo.
Ese cambio en la demanda tenía dos causas principales, por un lado el beneficio de añadir un barril de petróleo a una economía en desarrollo es mayor que el de añadirlo a una economía desarrollada, debido a la ley de retornos decrecientes, al igual que el beneficio del primer coche en una familia es mayor que el del tercero. Por otra parte, respondía a un proceso puesto en marcha por las élites económicas del mundo desarrollado denominado globalización que consiste en considerar el mundo como una unidad a la hora de producir. En agricultura la globalización implica que los países dejan de cultivar lo que ellos necesitan y pasan a cultivar lo que el mundo demanda. En industria, la globalización se manifiesta en deslocalización. Las industrias se trasladan a los lugares donde los costes laborales, energéticos y medioambientales les resultan más favorables. Los países desarrollados pierden agricultura e industria pero financian el proceso extrayendo los beneficios. Se eliminan todas las trabas a la expansión financiera y el crédito establecidas tras crisis financieras anteriores. La expansión financiera permite que las economías desarrolladas crezcan a pesar de que su demanda de petróleo crece mucho menos. A la dependencia del crecimiento económico con respecto al petróleo se le llama intensidad del petróleo (popularmente eficiencia energética) y se mide en miles de dólares de PIB por barril de petróleo. El descenso en la intensidad del petróleo se asocia con una mayor eficiencia en su uso, pero esta asociación es errónea. La mayor expansión del PIB independiente del petróleo viene asociada a la expansión del crédito (deuda). Cuando el PIB se contrae en una recesión inducida por el petróleo, la destrucción inicial de los negocios más dependientes del petróleo y la reducción del consumo discrecional crean la ilusión de un aumento de eficiencia energética, al caer el consumo de petróleo más deprisa de lo que cae el PIB.
Con la globalización, hay ganadores y perdedores. Ganan las élites económicas y financieras que han dirigido el proceso y se quedan los inmensos beneficios. Gana la nueva clase media emergente en los países en desarrollo beneficiados por la deslocalización. Pierden los agricultores de los países donde se expanden los monocultivos comerciales. Y sobre todo pierden los trabajadores de los países desarrollados, dado que la deslocalización provoca un exceso de oferta laboral que se traduce en una reducción de la población laboral y un estancamiento en dinero constante de los salarios cuando no su reducción, incrementando la desigualdad.
La imagen de esta foto que muestra el aprovechamiento de la gasolina en Vietnam, sirve de alegoría de la situación, China dirige la moto donde se sientan de manera preferente los países productores y grandes consumidores en desarrollo, mientras que los países desarrollados se sujetan como pueden y Japón está a punto de caer. Fuente: Chris Nelder
Desde un punto de vista de la demanda de petróleo la razón que hace que el mundo desarrollado pierda la subasta en beneficio de los países en desarrollo es que éstos pueden pagar un precio más alto debido a la transferencia de la producción de los países desarrollados, a obtener un mayor retorno económico del petróleo, a sus menores costes laborales, a sus laxas regulaciones medioambientales y a tener un mix energético con menor coste, lo que les permite reducir el impacto de la subida. Los protocolos medioambientales de los países desarrollados juegan en su contra al elevar el coste energético.
Hecho: El mundo en desarrollo compite con ventaja por el acceso al petróleo. El mundo desarrollado obtiene lo que sobra.
La demanda en la Gran Recesión. ¿Hacia un nuevo gran excedente?
Al periodo que se inicia en 2008 y en el que aún seguimos, se le denomina la Gran Recesión. Durante la crisis del 2008, a partir de julio los precios caen rápidamente hasta los $40/b que no se veían desde 2005, pero la demanda se recupera rápidamente, especialmente en el mundo en desarrollo donde la crisis apenas ha tenido incidencia e impulsa los precios al alza durante 2009 hasta los $80/b. Sin embargo a diferencia de anteriores crisis del petróleo, el mundo desarrollado no vuelve a incrementar su consumo de petróleo tras la recuperación, sino que retoma la tendencia a reducir su consumo que tenía entre 2005 y 2008. Claramente se están reproduciendo los mecanismos que condujeron a la crisis: Ante una producción insuficiente y un alto precio del petróleo, el mundo en desarrollo gana la subasta y satisface su demanda a costa del mundo desarrollado.
Entre 2011 y 2014 el precio se estabiliza por encima de los $100/b, un precio excesivamente alto para permitir el crecimiento económico en la mayor parte de la OCDE, que continúa destruyendo demanda. Es un precio también excesivamente alto para la demanda de los países en desarrollo y se empieza a observar una disminución en el incremento del consumo, indicativa de la existencia de exceso de demanda (demanda insatisfecha) como le ocurrió a la OCDE entre 2002 y 2005.
El consumo de petróleo en China, en millones de barriles por día, muestra una disminución en el incremento de la demanda desde 2011. Fuente: SnakeOil
En ese mismo periodo se ponen en marcha mecanismos tendentes a aliviar la escasez de oferta. Por una parte ante el alto precio muchos países (China, Rusia, India, Malasia, Yemen y Kuwait entre otros) reducen o cancelan sus programas de subsidios de petróleo a la población, ante la fuerte pérdida económica que suponen los subsidios a ese precio (Fuentes: Dansie et al., 2010; Balke et al., 2014). Por otra parte el alto precio sostenido pone en marcha proyectos de extracción de petróleo de esquistos en USA que se vuelven rentables, y que para 2014 han añadido en torno a 3 mbpd al mercado.
La situación provocada por una demanda de petróleo que retrocede (OCDE), o se estanca (resto del mundo), y una producción que tras años de estar limitada se expande, crea en 2014 unas condiciones similares a las que en 1980 dieron lugar a lo que se denominó "the big oil glut" (el gran excedente de petróleo). Al igual que entonces, el mundo desarrollado, debilitado por una crisis reciente (1979/2011) se precipita de nuevo hacia otra crisis al tiempo que trata desesperadamente de reducir su consumo de petróleo. Al igual que entonces, un productor (URSS en 1980/USA en 2014) está incrementando su producción, a la vez que la demanda se hunde. Pero también hay diferencias esenciales. El mundo tiene hoy un nivel de endeudamiento incapaz de soportar una grave crisis económica y los costes de extracción del petróleo han subido tantísimo, que puede que los precios necesarios para recuperar la demanda no sean asumibles para los productores. Resulta irónico que el mayor contribuyente al "oil glut", la Unión Soviética, colapsara unos años más tarde incapaz de soportar los bajos precios que produjo.
Hecho: Desde 2005 se observa una caída de la demanda de petróleo en el mundo desarrollado. Dicha caída está asociada desde 2008 a un periodo de bajo crecimiento económico, crisis de deuda, política monetaria sin precedentes, disminución de la participación laboral, estancamiento de salarios, aumento de la desigualdad y baja aceptación de la política tradicional.
¿Qué probabilidades hay de que la demanda se recupere pronto? Es difícil saberlo. La OPEP, en su informe de 2014 (World Oil Outlook) pronostica una caída de la demanda global hasta 2017 y espera un incremento de la demanda a partir de 2018, pero no espera que se recupere la demanda de 2013 hasta 2020. Fuente: World Oil Outlook 2014. La IEA (International Energy Administration) emitió su informe anual en septiembre, y en octubre revisó a la baja las previsiones sobre la demanda en 2014 y 2015. Fuente: Financial Post. Recordemos que la caída de la demanda se está produciendo a la vez que la caída de los precios, lo que es indicativo de debilidad económica. Tras la caída de la demanda en 2008, con el desplome de los precios la demanda global volvió a aumentar muy rápidamente. Cuanto más caiga el precio del petróleo más factible es que la demanda se recupere, sin embargo el consumo de los países desarrollados nunca se recuperó a los niveles de 2007 tras la crisis. La recuperación provino enteramente de los países en desarrollo. Esta vez hay indicios de que la caída de la demanda afecta tanto al mundo desarrollado como al mundo en desarrollo, por lo que la recuperación podría no ser rápida e incluso no tener lugar.
¿Qué consecuencias tiene la caída de la demanda? Crisis económica global, agudización de la crisis de deuda, reducción permanente de la capacidad de producción, pico de petróleo.
El crecimiento económico depende de que la demanda de petróleo crezca y el consumo crezca. La experiencia de 1980-83 nos indica que la demanda puede caer incluso cuando hay exceso de oferta y los precios del petróleo caen. La última vez que Europa creció, el petróleo estaba en torno a $40/b, que como veremos en el siguiente artículo es un precio que ahora arruinaría a todos los productores. Un mundo con demanda decreciente sería un mundo que cada vez tendría menos petróleo, como hemos aprendido en Europa, independientemente de cuanto petróleo se pudiera extraer.
Conclusión: Nos encontramos en el periodo más largo de reducción de la demanda de petróleo en el mundo desarrollado de la historia. La gran mayoría de la población, aún desconociendo las causas, considera las consecuencias inaceptables.