Quién sabe cuándo llegará la famosa y esperada corrección... Por ahora solo está consiguiendo introducir una notable incertidumbre en mis estrategias diarias por lo que espero que se resuelva pronto, en una dirección u otra.
Amadeus es un ejemplo perfecto de esta falta de alineación de factores, que complica la toma de decisiones con razón. Es cierto que estamos en una tendencia creciente definida y es cierto que rompemos resistencias sucesivas, pero no es menos cierto que tenemos una directriz superior que bloquea los amagos alcistas del valor, que el RSI muestra una divergencia más que considerable y que el mismo oscilador nos informa de una sobrecompra local que podría resolverse en ambos sentidos próximamente.
En conclusión, una amalgama de factores contrapuestos que hacen que decidirse sea tan complicado como interesante.