El petróleo llegó a subir siete dólares por barril desde el 5 de abril hasta el viernes pasado, descontado con clara intensidad que los principales países productores acordarían una congelación de la producción en el día de ayer. Esa subida del crudo, superior al 18%, fue el principal motivo para que las Bolsas europeas ascendieran más de un 6% desde entonces.
Pues bien. Arabia Saudí se negó ayer a contemplar cualquier tipo de medida encaminada a reducir la sobreoferta que no pasase por el concurso de Irán, que ni siquiera acudió a la reunión. Esto no sólo significa que la cotización del crudo descontó erróneamente una hipótesis que no se ha materializado, si no que deja la puerta prácticamente cerrada para que en un futuro cercano se pueda contemplar algún acuerdo que limite la oferta de petróleo en el mercado. Por tanto, debería ser más difícil que el precio del barril reaccione ingenuamente ante las declaraciones interesadas de algún país productor de petróleo.
Pero si no ha resultado ser demasiado sorprendente la falta de acuerdo en Doha, sí que ha sido más extraña la reacción del crudo en el día de hoy. Con la apertura de los mercados en la madrugada, el crudo ha llegado a perder más de dos dólares por barril. La calidad Brent, que el viernes cerraba por encima de 43 $, tocaba 40,50 $ en la apertura de las Bolsas europeas. Pero desde entonces, ha recuperado terreno hasta situarse de nuevo en una zona muy cómoda, por encima de 42,50$. Precio en el que parecía estar incluida la congelación de oferta que no se ha producido.
Pero más llamativo incluso ha sido el movimiento de las Bolsas.
En ningún momento han mostrado una tensión muy significativa ante el fracaso de las negociaciones en Doha. Y la recuperación paulatina del petróleo a lo largo del día, ha llevado a los índices europeos a cerrar con claras subidas, lo que debe ser considerado como un claro síntoma de fortaleza.
Veremos cómo evoluciona el petróleo en las próximas horas, cuando se apague la especulación financiera que ha podido dotar de cierta artificialidad a la sesión de hoy.
La temporada de presentación de resultados (esta semana tendremos la publicación de resultados de grandes empresas en Wall Street), el movimiento del Dólar y el petróleo seguirán conduciendo los movimientos de las Bolsas esta semana.
Pero en la jornada de hoy, los índices europeos (el DAX supera ya con claridad los 10.000 puntos), han lanzado un claro mensaje alcista en el corto plazo, obviando un factor con un fortísimo potencial bajista.
