El mercado de valores es quizá uno de los mercados que más atrae a inversores en el mundo; es por ello que muchos de ellos siempre se preguntan cómo tomar la mejor decisión para invertir; en este post te hablaremos sobre cómo elegir empresas para invertir en ellas.
Criterios de selección de una compañía
Sesgo de cercanía
Por lo general la mayor parte de los inversores, sobre todo, cuando se empieza a invertir en bolsa, se centran en las empresas más grandes del mercado nacional.
Esto es, Inditex, Telefónica, Banco Santander, BBVA, Repsol, Iberdrola, etc.
Aunque el comportamiento de las empresas haya sido bueno o malo, el hecho de no saber cómo seleccionar empresas para invertir, hará que dejemos pasar oportunidades.
Cuántas veces hemos dicho, sabía que esta empresa subiría... Pero no he comprado.
Además, si aprendemos lo más básico para poder aplicar filtros o screeners, evitaremos comprar empresas cuando éstas estén cotizando con elevados múltiplos.
Invertir en bolsa básicamente consiste en seleccionar empresas que puedan crecer en el futuro obteniendo mayores beneficios y que en el momento de comprarlas, no estén cotizando con unos múltiplos exigentes.
Ratios de valoración
Para ello, vamos a ver cuáles son los principales ratios que tendremos en cuenta, de dónde podemos sacar la información y por qué seleccionaremos o no una empresa según sus datos. Al menos trataremos de acercarnos a un precio razonable para reducir nuestra exposición a tener una cartera sobrevalorada.
Antes de empezar con los datos a tener en cuenta para realizar una adecuada selección de valores, debemos entender que en las bolsas cotizan tanto empresas pequeñas como grandes, y que las empresas pequeñas, por lo general, suelen tener más potencial de crecimiento y en consecuencia sus múltiplos suelen ser más exigentes, aunque como veremos, todo depende.
Para evitar contradicciones, es interesante comparar los múltiplos de una empresa con los del sector y además con los datos históricos así como con las previsiones futuras.
Aunque existen muchas webs que ofrecen datos fundamentales, la experiencia me dice que es más cómodo y fiable obtener los datos de algún bróker que disponga de la información que queramos.
¿Qué tener en cuenta para filtrar valores?
Aunque existen muchos filtros, vamos a estudiar cuáles son algunos de los más importantes y a los que podemos acceder de forma sencilla y rápida.
- Beneficio neto por Acción: Divide el beneficio neto (después de impuestos) entre el número de acciones. Es útil en la medida que tenemos en cuenta las ampliaciones/reducciones de capital, lo que nos da una visión más realista del beneficio que obtendremos como accionistas.
- Rentabilidad por dividendo: Del beneficio que se reparte entre las acciones, la rentabilidad por dividendo nos dice qué rentabilidad obtendremos al cabo del año, por dividendos cobrados, al comprar las acciones a un determinado precio, evidentemente tendremos que mantenerlas hasta cobrar el dividendo.
- No sólo debemos fijarnos en lo que cobraremos, sino que nos da una visión sobre cómo valora el mercado las acciones. Cuanto mayor sea la rentabilidad por dividendo, más baratas estaremos comprando las acciones.
- Podemos comparar la rentabilidad por dividendo entre las empresas del sector y además con el histórico de la empresa, de manera que tendremos una sencilla medida de valoración.
- No sólo debemos fijarnos en lo que cobraremos, sino que nos da una visión sobre cómo valora el mercado las acciones. Cuanto mayor sea la rentabilidad por dividendo, más baratas estaremos comprando las acciones.
- PER: La relación entre el precio de cotización y el beneficio por acción nos dice cuántas veces estamos pagando el beneficio de una empresa, de manera que si calculamos la inversa, nos dirá la rentabilidad anual que se espera de esa acción. Igualmente comparándolo entre el sector y el PER histórico de la empresa, sabremos en qué momento nos encontramos en cuanto a la valoración del mercado se refiere.
- Precio Objetivo: Este es el precio que espera que consiga la acción según el consenso de analistas. Los analistas estudian determinadas empresas, analizando constantemente las variables que afectan a las empresas (noticias, nuevos contratos, evolución del sector, fiscalidad, normativas...)
- De esta manera van incorporando la nueva información a sus modelos de valoración y otorgan un precio objetivo que va variando en función de la información relevante que van conociendo de las empresas.
¿Qué más puedo tener en cuenta para seleccionar valores?
Existen otros datos más técnicos pero no menos importantes como el Ebitda, Ebit, la deuda, los activos y el flujo de caja. Tenerlos en cuenta es muy importante para saber si la empresa está ganando dinero y qué rentabilidad está obteniendo de sus operaciones.
- Volumen de negocio: Nos ayuda a identificar si la empresa es grande o pequeña. También lo compararemos con el beneficio, para saber si el aumento del beneficio se debe a un mayor aumento de las ventas o a otro tipo de operaciones.
- Ebitda: Es uno de los datos más utilizados en la actualidad, nos dice el beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones. El Ebitda nos ayuda a tener una medida de los beneficios sin tener en cuenta gastos de intereses, amortizaciones etc. Nos ayuda a ver la rentabilidad del negocio eliminando eventos corporativos circunstanciales como adquisiciones, etc.
- EBIT: La diferencia con el Ebitda es que incorpora depreciaciones y amortizaciones.
- Deuda financiera neta: Se calcula sumando todas las deudas y restando el efectivo y las inversiones financieras temporales. Es interesante encontrar empresas que no estén excesivamente endeudadas.
- Activo neto por acción: Es el valor que tienen los activos de la empresa en el mercado, descontando la deuda financiera neta y otros pasivos. Permite estimar la creación de valor para el accionista.
- Cash flow por acción: El cash flow mide la diferencia que hay entre las entradas y salidas de dinero en la caja de una empresa. Si lo dividimos entre el número de acciones, nos sale la rentabilidad de la acción según el dinero que entra en la empresa. Es muy útil para tener una magnitud real de la situación de ingresos y gastos de la empresa ya que no tiene en cuenta el "ya te pagaré" que durante la crisis ha obligado a muchas empresas a provisionarlo. Empresas con una rentabilidad positiva por flujo de caja, son muy interesantes para tenerlas en cartera si su valoración es adecuada.
Todos estos indicadores es conveniente compararlos con las empresas del sector así como con los datos históricos para ver si la evolución es positiva.
Adicionalmente se debe tener en cuenta otros aspectos a la hora de invertir:
- Diversificar la cartera: en este caso se recomienda no invertir todo en una misma empresa sino apostar por una o dos empresas que presenten una alta rentabilidad.
- Analizar los balances de la Compañía: para ello se deberá analizar los niveles de deuda y de liquidez de la compañía.
- Realizar una investigación completa de la empresa: tener en en cuenta la historia de su fundación, el sector de la economía en el que desempeña sus actividades.
- Analizar los factores de riesgo: las acciones de las empresas son volátiles; es por ello que debes analizar la forma en la que puedes disminuir ese riesgo.
En definitiva, teniendo en cuenta estos pocos datos, primero podemos tener una visión de la valoración, y si la valoración nos resulta atractiva, podemos pasar a analizar si la empresa es rentable y qué rentabilidad nos ofrecerá de cara a los próximos ejercicios. Evidentemente no hay nada seguro, pero estos datos nos ayudarán a conocer mejor las empresas y su situación financiera.