Tengo por costumbre sentirme orgulloso de todas mis amistades. En consecuencia, si así considerara a los señores Gil o Sánchez, no dude usted que lo hubiera hecho constar en el mismo artículo, aunque solo fuera para evitar susceptibilidades. Sucede todo lo contrario; al no mantener ningún vínculo personal con ambas personas, puedo desmentirle algo que sorprendentemente deja caer en su comentario de forma un tanto maliciosa y sin ninguna base. Por otra parte, le aclaro que el objetivo del artículo no reside ni en beneficiar, ni en perjudicar los proyectos formativos de dichos autores pues no me lleva ningún interés en ello. Como habrá leído, se centra en la actitud displicente de algunos inversores que toman decisiones sin antes informarse adecuadamente, desechando valores tan importantes como la capacidad de profundizar en aquellos asuntos que sean de su interés. En cuanto a los resultados del fondo de inversión del señor Gil, desconozco si la fuente que usted utiliza es la más adecuada para obtener la clase de información que está rastreando. En todo caso, estoy seguro de que hallará usted la respuesta entre el contenido que el citado gestor ha publicado o citado a lo largo de estos años, incluso en los archivos o publicaciones especializadas. La ventaja de internet es que incluso nos permite contactar directamente con quien nos interese y solicitar la información que necesitemos. En segundo lugar, confío en que usted mismo averigüe el servicio que Darwinex presta pues no me corresponde esa misión.. Pero desde luego acceder, sin más, al portal de dicho website no bastará nunca a la hora de hallar ese tipo de datos. En el artículo señalo este website como fuente para comprobar los resultados que los sistemas de inversión creados por dicho gestor pueden ofrecer. Mi convencimiento es absoluto respecto al éxito de su búsqueda -resultados, rentabilidad, drawdown, etcétera-, siempre y cuando depure y refine su búsqueda, bien en dicho portal, bien en la web empresarial de este trader algorítmico.
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