Campox2
27/04/25 13:23
Ha respondido al tema
El juego de los brokers: Una historia de venganza y trampa en el mundo del trading
Marcos se sentó frente a las pantallas.No había presión. No había prisa.Solo la orden en su mente: 25.000 contratos. Invisible.El gráfico del DAX respiraba lento.Era una sesión de bajo volumen, una trampa perfecta para cometer errores.9:05 AM Identificó las zonas: niveles de consolidación en días anteriores, donde el volumen había explotado sin mover el precio. —Aquí es donde viven los grandes —pensó—. Aquí es donde voy a esconderme.Activó el modo ejecución:Split de orden.5 algoritmos distintos:Uno enviando iceberg orders.Otro fragmentando en micro-blocs aleatorios.Un tercero ejecutando durante el ruido de noticias menores, para camuflarse.Uno más buscando liquidity voids: espacios donde podía colocar órdenes sin alertar.Y el último, monitorizando el flujo de órdenes agresivas.9:14 AM Lanzó el primer bloque. Cien contratos escondidos dentro de una orden de 1.200, como quien se cuela en una manifestación.Nada. El precio ni se inmutó.Siguió.9:21 AM En plena apertura de futuros de EE. UU., aprovechó el repunte de volatilidad. Disparó otros tres bloques mientras el mercado oscilaba bruscamente. En la confusión, nadie mira quién empuja.9:43 AM Una orden grande aparece en el nivel 15.520. Extraña. No coincide con el patrón de los últimos días.—¿Un cebo? —susurra Marcos.No entra. Espera.La orden se desvanece.Un spoofing.Trampa institucional para cazar a los ansiosos.—Están aquí. Y me están viendo —pensó.Redujo el ritmo de ejecución a la mitad.Oscureció aún más sus algoritmos.10:05 AM Cambiaba activos. Pasaba de futuros del DAX a mini-futuros del EuroStoxx solo para disfrazar su huella. Ejecutaba como si fueran dos operadores distintos.Y entonces, en un instante, lo sintió.El mercado comenzó a desplazarse. No mucho. Tres ticks.Demasiado pronto.—Me han olido.Canceló todas las órdenes pendientes. Silencio. Inmovilidad.Dejó pasar 12 minutos sin tocar nada.Reseteo. Volvió. Cambió el tamaño de ejecución. Activó una nueva estrategia: órdenes en espejo. Lo que hacía por un lado, lo invertía en otro activo correlacionado, para neutralizar señales.12:30 PMQuedaban 4.000 contratos.No había urgencia. Solo una obsesión: no dejar rastro.Los ejecutó entre las sombras de un cierre parcial del CAC 40, cuando los spreads se ampliaban.El ruido ocultó el movimiento.13:00 PM Fin. Orden completada.El DAX ni se enteró.Marcos se quitó los cascos. Miró sus manos.Temblaban levemente.Pero en su rostro, una media sonrisa.No había sido un trade.Había sido un acto de espionaje.El mensaje de Gabriel llegó por Telegram, solo dos palabras:“Buen fantasma.”Continuará...