El PP facilita la semilibertad a Carromero al mantenerlo de asesor en la capital cobrando 50.474 euros anuales
El Ayuntamiento de Madrid ha comunicado a Interior que le reserva la plaza
Se le suspendió provisionalmente por tener un proceso judicial abierto
Ángel Carromero, el dirigente de Nuevas Generaciones de Madrid condenado en Cuba por la muerte en accidente de tráfico de los opositores Oswaldo Payá y Harold Cepero, tendrá más fácil conseguir el tercer grado penitenciario —la semilibertad— si puede demostrar que tiene un empleo. Y el PP le va a facilitar esa posibilidad al mantenerlo en el puesto de asesor que Carromero tenía en el Ayuntamiento de Madrid antes de viajar a la isla caribeña, como confirmó este miércoles la concejal de Hacienda, Concepción Dancausa.
Demostrar que se cuenta con un puesto de trabajo es una de las condiciones que Instituciones Penitenciarias tiene en cuenta a la hora de aprobar un posible régimen abierto de un interno. Carromero no es un preso cualquiera y cuenta con el respaldo de su partido político. De esta forma, tendrá el mismo empleo que tenía antes del trágico accidente: un puesto de libre designación en el Ayuntamiento que preside Ana Botella.
El dirigente de Nuevas Generaciones fue condenado recientemente en Cuba a cuatro años de cárcel tras el accidente de tráfico del pasado 22 de julio, en el que murieron los opositores cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero, que no llevaban puesto el cinturón de seguridad. De este siniestro salieron ilesos Carromero, que conducía el vehículo, y el joven sueco Jens Aron Modig, dirigente de una formación conservadora de su país y que también viajaba en el mismo automóvil.
Carromero se declaró culpable y no recurrió la sentencia para así acelerar su regreso a España. Este se produjo el pasado 29 de diciembre, tras intensas negociaciones diplomáticas. Según el acuerdo con Cuba, el dirigente de Nuevas Generaciones podía volver a su país para cumplir la pena que le fue impuesta en Cuba.
Antes del viaje, Carromero trabajaba como consejero técnico en la Junta de Distrito de Moratalaz, a las órdenes de la concejal Begoña Larrainzar (PP). Por este puesto cobraba 50.474 euros anuales, según figura en la relación de puestos de trabajo del Ayuntamiento de Madrid. Sin embargo, tras su detención en Cuba fue suspendido provisionalmente de funciones, al aplicársele por analogía, como al resto del personal eventual, el Estatuto Básico del Empleado Público. “Se le suspendió provisionalmente al haber un proceso judicial en curso”, explicó la concejal Dancausa.
Pero, también en cumplimiento del estatuto de los funcionarios, el Ayuntamiento le ha mantenido el sueldo durante los últimos meses, aunque reducido, al no poder acudir al puesto de trabajo por encontrarse en prisión. Del sueldo mensual neto de casi 3.000 euros que percibía, pasó a cobrar alrededor de 950 euros al mes de salario base. Además, durante todo este tiempo, Carromero seguía figurando en el directorio municipal. Ahora, tras cumplir cinco meses de prisión en Cuba y ser condenado a cuatro años de reclusión, Carromero ha sido encarcelado en Segovia, donde espera la decisión del Ministerio del Interior.
La concejal aseguró que, tras recibir una petición de la Junta de Moratalaz, el Ayuntamiento ha comunicado al ministerio que Carromero cuenta con un puesto en “exención jurídica provisional” y que, en el supuesto de que se le aplique el tercer grado penitenciario, podrá reincorporarse. “En el mismo puesto”, afirmó Dancausa. Por tanto, también con las mismas condiciones.
“No hay ninguna contradicción”, defendió la responsable de Hacienda sobre el hecho de mantenerle en el puesto de libre designación, porque, aseguró, la sentencia que condena al dirigente de Nuevas Generaciones no implica “inhabilitación desde el punto de vista administrativo”. Se refiere a que el Estatuto del Empleado Público especifica que el personal eventual perderá esa condición si la sentencia contempla la inhabilitación para cargo público.
La decisión sobre la semilibertad de Carromero corresponde ahora a Instituciones Penitenciarias, tras escuchar a la junta de clasificación. Pero si el recluso cuenta con un puesto de trabajo, tiene mucho a su favor.
El portavoz de la familia y diputado del PP Pablo Casado confía en que Carromero obtenga la semilibertad la próxima semana, tras el informe de la junta de tratamiento del centro, que se reúne este jueves, informa Aurelio Martín. La defensa solicitará que el control del interno sea a través de un sistema telemático, en vez de acudir a dormir a la cárcel, aunque depende de la decisión de la Audiencia Nacional.
Tras visitar este miércoles a Carromero, Casado lo encontró algo mejor de ánimo, “sereno” y “deseando salir para incorporarse a su trabajo y a su vida normal”.
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