Portátiles con SO Windows preinstalado con visos de ilegalidad.
Cuando como usuarios pretendemos adquirir un ordenador portatil, no tenemos que preocuparnos por el Sistema Operativo(SO). Ya viene preinstalado. Lo alucinante surge cuando no deseas este sistema sino otro gratuito como el Ubuntu. En este caso todo son dificultades. Muchas marcas nos condicionan la garantía al mantenimiento de este monopolístico SO. Otros fabricantes tras negociar, condicionan físicamente los equipos para que no acepten otros SO y en el menor de los casos se producen problemas en la instalación de complementos como la conexión Wifi. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU)constató que la gran mayoría de los establecimientos visitados y los principales fabricantes de ordenadores portátiles no ofrecían al cliente la posibilidad de elegir el sistema operativo. En cuanto a recuperar la parte del coste de la licencia pagada por el sistema operativo Windows en caso de que el usuario decidiera sustituirlo por otro, seguramente porque en vez de pagar la licencia cobraron por su preinstalación. Pero y si !simplemente no me gusta esa maldita dependencia¡ Los distintos sistemas operativos de Windows acaparan una cuota de mercado superior al 80% y los fabricantes que ofrecen este sistema preinstalado en sus equipos representan hoy por hoy la casi totalidad de los ordenadores portátiles comercializados en España. La OCU se dirigió a la Comisión Nacional de la Competencia para que investigara si existía algún tipo de práctica por parte del monopolio Microsoft contraria a las normas de defensa de la competencia. De confirmarse su existencia, estas prácticas supondrían un claro perjuicio para los consumidores, que estarían pagando un sobreprecio por la licencia del sistema operativo preinstalado en los ordenadores portátiles sin que puedan solicitar el reembolso del mismo en caso de que decidan sustituir Windows por un sistema alternativo. Otro problema añadido es la cantidad de programas que se nos cuelan tras la estela del dichoso Windows. Antivirus casi innecesarios con Ubuntu. Editores y programas de edición y lo que es peor, periféricos como impresoras diseñados para protegerse de todo lo que no sea el condenado SO.
burla al consumidor