Renta Corporación registró en 2023 pérdidas netas de 15,9 millones de euros, frente a las ganancias de 3,6 millones de euros que obtuvo en 2022, según ha informado este jueves la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La empresa ha señalado que, en el sector inmobiliario, las tensiones inflacionistas y la subida de los tipos de interés se han traducido en un incremento de los costes y de las rentabilidades exigidas, lo que ha conllevado una caída significativa de las transacciones y del volumen de inversión, impactando en las dos líneas de negocio de Renta Corporación.
De este modo, los ingresos de la compañía ascendieron a 42 millones de euros en 2023, un 22% menos que en 2022.
De esta cantidad, 38,5 millones de euros correspondieron al negocio transaccional (venta de inmuebles y gestión de proyectos inmobiliarios), con un retroceso del 9,3% respecto a 2022, mientras que 3,4 millones procedieron del negocio patrimonial, un 2,7% menos. Este último incluye la gestión de las socimi Vivenio y Wellder.
La gestión de estas socimis generó a la compañía unos ingresos totales de 2,1 millones de euros, 2,6 millones de euros menos que en 2022, ejercicio que incluía la contabilización de una comisión de incentivo de Vivenio que no se repitió el año pasado.
Por su parte, el negocio transaccional de Renta Corporación se ha concentrado principalmente en operaciones del segmento residencial y logístico.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de Renta Corporación fue de -13,6 millones de euros en 2023, frente al Ebitda positivo de 9,7 millones de 2022.
Además de los resultados, Renta Corporación ha informado a la CNMV de que Elena Hernández de Cabanyes ha renunciado al cargo de consejera y de miembro de las Comisiones de Auditoría y de Nombramientos y Retribuciones, con efectos desde este jueves, por motivos personales