Como bien indica su nombre, los seguros de vida son productos de protección que en el sector se encargarán de proteger tanto a tu familia como a otros seres queridos a tu cargo si llega a producirse alguna situación imprevista desde la que tú no puedas hacerlo. Su finalidad principal es económica y, por ello, debes pensar: ¿cuándo es útil su contratación?
Utilidad del seguro de vida: para ti, para tus seres queridos
¿Alguna vez has pensado en qué sucedería en tu seno familiar si tus ingresos dejaran de llegar mes a mes como consecuencia de tu muerte imprevista? Pues, en caso de no haberlo hecho, el sector asegurador ya lo ha pensado por ti… ¡Para eso sirve un seguro de vida! Además, más allá de permitir la estabilidad económica de tu hogar tras tu muerte, se tratan de pólizas que también te protegen a ti mismo: si contratas un producto para la invalidez, podrás beneficiarte incluso cuando tus ingresos se vean considerablemente reducidos al no poder atender tus actividades profesionales y, por tanto, no poder tener ganancias.
Sea como fuere, los seguros de vida, generalmente, se usan para que tus responsabilidades queden más que protegidas. Sin embargo, debes tener claro que su contratación no es obligatoria, sino que depende de tus necesidades.
¿Necesitas un seguro de vida? Te ayudamos a averiguarlo
Nunca podemos saber cuándo va a suceder un imprevisto que ponga en peligro tu integridad. Y, en este sentido, aunque contratar un seguro de vida no va a evitar que puedas sufrir una enfermedad o un accidente, con él podrás evitar los problemas económicos derivados de tu pérdida, pues los acabarán sufriendo tu familia y allegados.
De este modo, al buscar tu protección, deberás plantearte qué seguro de vida comprende mejor la cobertura de tu núcleo familiar. En Traetupóliza, creemos que lo esencial es una póliza que solucione la falta de tus ingresos en el hogar. Tras lo dicho, te presentamos dos situaciones para las que contar con esta protección es muy útil.
1. ¿Tienes una hipoteca o una deuda pendiente?
Queremos que seas consciente de que, si tienes una hipoteca y en tu familia se pueden ocasionar problemas para poder pagarla, lo más recomendable es que tengas un seguro de vida porque, así, podrás saber que en tu caso eso no va a ocurrir.
Recuerda que contratar este tipo de servicios es un acto de amor, y sobre todo, de responsabilidad hacia los tuyos: si tú has adquirido una deuda, eres tú el que tiene la obligación de pagarla o de, al menos, ayudar a hacerlo… Quizás esto no te convenza, pero para esto existen estas pólizas.
2. ¿Tus hijos dependen económicamente de ti?
Por otro lado, otra situación muy habitual para contratar estos seguros de vida surge cuando tienes hijos y estos todavía son dependientes y necesitan tu ayuda. Al final, eres tú quien debe encargarse de su protección y, para lograrlo, de mantener el nivel de vida al que están acostumbrados, al menos hasta que ellos puedan valerse por sí mismos. Contratar un seguro de vida te evita muchas complicaciones: ¿Tu cónyuge podría hacer frente a la nueva situación?, ¿Quién podrías ayudar a tu familia?, etc.