Mediaset lleva desarrollando una teórica tendencia alcista desde mediados de 2012. Decimos teórica porque, aunque existe una directriz alcista que se ha respetado con cierta precisión hasta ahora, no es menos cierto que, desde los máximos de 2014 se ha generado también otra directriz bajista que limita el movimiento al alza del valor.
Esta estructura de dos directrices forma lo que conocemos como triángulo simétrico y el precio acaba de tocar la línea superior de dicho triángulo. Dada la cercanía de esa línea de resistencia, no podríamos descartar una rotura alcista, pero parece más probable que veamos un ataque a la línea inferior, lo que nos daría un objetivo bajista en el entorno de los 10-10,5 €/acción.
Aun así, todavía hay una zona de control que debe vencer para confirmar la hipótesis bajista, que es el soporte de los 10,8 €/acción, que coincide con una confluencia de Fibos interesante.