Descensos en las Bolsas europeas en el día de hoy.
Lo más significativo que ha pasado en las últimas horas lo encontramos en el petróleo, que cae con claridad desde la mañana del día de ayer. La calidad Brent pierde los 40 $, lo que supone un punto de debilidad para unos índices que, en casos destacables como el DAX alemán, se encuentran a las puertas de resistencias estratégicas (los 10.000 puntos).
Existe un motivo doble por el que el petróleo está corrigiendo: de un lado, parece que Irán se sigue oponiendo a sumarse al acuerdo de congelación de la producción; por otro lado, ayer la OPEP disminuyó sus previsiones sobre demanda de petróleo para este año.
Pero más allá del oro negro, las Bolsas siguen contando con buenas cartas.
Las medidas anunciadas por el BCE resultan positivas para las Bolsas, especialmente, para el sector bancario. Por otro lado, tenemos la estabilización del Yuan. Además, los índices europeos se pueden beneficiar de una más que probable caída del Euro en los próximos días (tras la extraña subida del jueves), que aún no se ha dado. Wall Street cotiza por encima de resistencias (los 2.000 puntos del S&P500).
La eventual superación de los 10.000 puntos del DAX (ya llevamos dos intentos desde el jueves) sería un factor adicionalmente positivo para el conjunto de Bolsas europeas. Y es posible que este acontecimiento esté relacionado con la recuperación de los 40 $ del barril de petróleo.
Por otro lado, hoy empieza la reunión de dos días de la FED, cuyas conclusiones conoceremos mañana a las 19:00. Dándose por hecho que no van a subirse los tipos de interés en esta ocasión, la clave estará en escrutar el mensaje de la FED para calibrar las posibilidades de que haya una, dos, o hasta tres subidas de tipos de interés este año. En anteriores ocasiones, el mercado no ha reaccionado positivamente a un exceso de ambigüedad por parte de la Institución, que tiene que conciliar una visión positiva sobre la economía con un ritmo lento de subidas para satisfacer al mercado.
La eventual articulación un mensaje complaciente con el mercado por parte de la FED se sumaría al resto de factores mencionados para que las Bolsas alarguen más su dulce momento, al rebotar ya un 17% en las últimas cuatro semanas.
